Esto es lo que ahorrarías con electrodomésticos eficientes
La eficiencia supone ahorro, y el ahorro es motivo de alegría. Y más si se trata de ahorro energético y sobre todo de ahorro en la factura de la luz. Si, esa factura que nos trae de cabeza desde hace tiempo, tanto que Facua alerta sobre el hecho de que en 2015 la factura de la luz fuese un 5,3% más cara que la del 2014, lo que ha supuesto para el usuario medio pasar a pagar 45,96 euros más en el ya pasado 2015.
Veremos qué ocurre a lo largo de este 2016, de momento la comisión Delegada del Gobierno para Asuntos Económicos autorizó las bajadas para la electricidad que entraron en vigor el 1 de enero y que supondrán informan desde Moncloa un ahorro medio del 2,8% en la factura para los consumidores domésticos en relación a la factura de enero de 2015, aunque un ahorro muy inferior en relación a la factura de diciembre, un 0,7%.
Al margen de las medidas que puedan tomar los poderes públicos, como usuarios tenemos en nuestra mano opciones con las que abaratar el recibo tanto a corto como a largo plazo. Una de ellas y que tiene un resultado a largo plazo es invertir en electrodomésticos eficientes.
¿Cuánto ahorro con electrodomésticos eficientes?
Dependiendo del electrodoméstico y de su antigüedad, el ahorro económico será mayor o menor, aunque ahorro siempre habrá. Cuando hablamos de eficiencia en un electrodoméstico, hablamos de aquellos que estén etiquetados con la calificación A y el color verde, con los últimos cambios en el etiquetado, un electrodoméstico puede gozar de la máxima calificación de eficiencia que es A+++.Es precisamente con esta última calificación con la que más ahorro se consigue alcanzar.
La Asociación Nacional de Fabricantes e Importadores de Electrodomésticos (ANFEL) ha elaborado una estimación de ahorro medio anual que se conseguiría al sustituir electrodomésticos con una antigüedad de 5 a 10 años por electrodomésticos A++ y A+++. El electrodoméstico que está continuamente funcionando, el frigorífico que según IDAE (Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía) tiene un consumo medio de 655 kWh, si es sustituido por uno A++ podría generar un ahorro máximo de 82,10 euros al año y un ahorro energético de 456,09 kWh al año según ANFEL, mientras que el ahorro máximo con uno A+++ sería de 89,50 euros al año y un ahorro energético de 497 kWh anuales. En este sentido, los combis ahorrarían aún más, hasta 158,38 euros si lo sustituimos por uno A++ y hasta 172,66 euros si es por uno A+++.
La lavadora es otro de los electrodomésticos que más consumo requiere junto al lavavajillas, según IDAE, 254 kWh y 245 kWh respectivamente. En el caso de la lavadora, una A++ aportaría un ahorro máximo de 55,01 euros y 305,60 kWh al año y una tipo A+++ supone un ahorro máximo de 59,63 euros y 331 kWh al año. Por consiguiente, sería de 56,55 euros y 314,16 kWh al año el ahorro con un lavavajillas A++ y de 61,54 euros y 341,88 kWh con uno calificado como A+++.
Si se dispone de secadora, el ahorro es mayor ya que el consumo energético que hace es mayor. Si se sustituye por una A++, el ahorro energético sería de 658,64 kWh al año y el ahorro económico máximo sería de 118,56 euros, con una secadora A+++, el ahorro energético máximo sería de 714,78 kWh y el económico sería de 128,66 euros al año.
Lógicamente, este tipo de electrodomésticos calificados con el mayor grado de eficiencia energética suponen una mayor inversión, pero que se vería amortizada en los primeros años dado el ahorro energético que se produce y que se traduce en ahorro en euros en nuestra factura. No se trata de renovar por completo el equipamiento del hogar si no se necesita, sino de valorar invertir en este tipo de electrodomésticos a la hora de sustituir alguno de los electrodomésticos en el hogar en caso de que haya dejado de funcionar o de cubrir la necesidad para la que estaba planteado.