El Ibex ahonda las pérdidas en la recta final del año, ¿qué ha pasado?
El año ya está cerrado para muchos, pero no para el petróleo. Con una caída por momentos de hasta el 3%, el oro negro, que durante 2015 se ha convertido en una auténtica maldición para la renta variable global, arrastró ayer al Ibex 35 a unas pérdidas del 1,35%, hasta los 9.552,50 puntos.
El selectivo nacional busca un rebote que maquille sus resultados en la recta final de año, pero ha caído una hoja más del calendario y, golpeado ayer por el crudo, sigue sin encontrar su camino. Para lograr el ansiado empate, un auténtico milagro según los analistas, le quedan dos sesiones y media y nada menos que un 7% por recuperar.
La mecha del incendio que terminó por desencadenar el precio del petróleo la puso la Bolsa china. El índice de referencia del gigante asiático registró una corrección de más de un 2,5% en la que fue la jornada con mayor caída del último mes. Sobre el ánimo de los inversores pesó la inminente reforma llamada a cambiar cómo cotizarán las empresas en su parqué. En un paso más en esa dirección, el máximo organismo legislador de China aprobó el domingo una propuesta para reformar el sistema de salidas a Bolsa que, según explica a Reuters Gu Yongtao, estratega de Cinda Securities, “es negativa para el mercado, porque ejerce presión adicional sobre las valoraciones de las acciones”.
A ello hay que sumarle el mal dato sobre los beneficios de las empresas industriales del país, que, pese a que sigue siendo alto, creció a menor ritmo de lo esperado y fue percibido por los inversores como una muestra más de la ralentización de China. La incertidumbre que rodea al gigante asiático lleva meses lastrando el precio de las materias primas y, así, las malas vibraciones de Asia llegaron una vez más a las empresas de recursos básicos de Europa. De hecho, el sector sufrió un correctivo del 0,86%, ahondando en unas pérdidas anuales que ya alcanzan el 33,93% y que le sitúan como el farolillo rojo del Stoxx 600.
Todo ello, apuntan varios analistas, con el Footsie británico al margen. La Bolsa británica tiene una fuerte presencia de compañías mineras, que se libraron de la quema debido a la celebración del Boxing Day, festivo. La sangría, por tanto, pudo ser mayor. En España, la nueva pérdida de confianza por parte de los inversores en las materias primas arrastró con especial virulencia a las cotizadas acereras. De hecho, ArcelorMittal fue el farolillo rojo de la sesión con unas pérdidas del 4,62% y Acerinox también ocupó una de las posiciones de la cola con una corrección del 2,41%.
En el resto de parqués europeos, la sesión transcurrió por los mismos derroteros. Las Bolsas comenzaron la mañana planas, pero el derribo del precio del crudo llevó al Dax alemán a dejarse un 0,69%, al Cac francés un 0,90%, al Mib italiano a caer un 0,41% y al Euro Stoxx a ceder un 0,85%. A pesar de sufrir importantes pérdidas en la recta final del año, los parqués del Viejo Continente siguen cotizando por encima del español y, si no ocurre nada extraordinario, cerrarán el año en números negros.
La renta variable europea ha sufrido las mismas vicisitudes internacionales que la española. Sin embargo, el mayor peso en el selectivo nacional de un sector bancario lastrado por la política monetaria expansiva del Banco Central Europeo, marcó las diferencias. A ello se le sumó la fuerte exposición de varias de las grandes cotizadas a mercados muy cuestionados por parte de los inversores, como el de Brasil.
Al otro lado del Atlántico, el comportamiento de Wall Street, lejos de ser el bálsamo al que tiene acostumbrado a los inversores, actuó como sal en la herida de las Bolsas europeas, acentuando sus pérdidas. La renta variable mundial baila al son que toca el precio del petróleo, y la estadounidense, pese a su fortaleza, no fue menos. A media sesión, el Dow Jones caía un 0,50%, el S&P un 0,59% y el Nasdaq cedía un 0,61%. El barril West Texas, de referencia en norteamérica, cotizó fuertemente a la baja tras cuatro sesiones de subidas tras la eliminación de las restricciones a la exportación de crudo.
En el mercado de la deuda, el interés del bono español a diez años cayó hasta el 1,79%, aunque la prima de riesgo repuntó a los 123 puntos básicos debido al mayor descenso del interés del bono alemán, que sirve de base para su cálculo. La prima de riesgo se encuentra actualmente por encima de los niveles poselectorales, tras experimentar el pasado jueves un fuerte repunte en una sesión, la del día 24, que se desarrolló a medio gas por el festivo.
Por su parte, el euro se mantiene en los 1,09 dólares al cambio en los que lleva anclado ya seis sesiones. La moneda comunitaria no termina de encontrar la senda a la baja con respecto al dólar desde su repunte tras la tibia reunión del Banco Central Europeo y, pese a la subida de tipos de la Fed, se le resiste una igualdad con la divisa estadounidense, aunque los expertos prevén que se alcanzará en primavera del próximo año.