Cushman & Wakefield busca adquisiciones
La consultora dispone de 1.000 millones para compras, también en España
La consultora inmobiliaria Cushman & Wakefield, una de las grandes firmas del sector en el mundo, se encuentra en un proceso de integración con la rival DTZ y con una agresiva política de adquisiciones por delante, donde España también se sitúa como objetivo. Así lo explica al menos Oriol Barrachina, director general en España.
“Seguimos teniendo mucho dinero en caja y se utilizará de forma selectiva”, apunta Barrachina. “El objetivo es convertirnos en la mayor consultora del mundo, donde exista una pata que reforzar, compraremos o ficharemos”, asegura. Esta empresa ejerce de intermediaria en operaciones inmobiliarias y asesora a empresas en este campo.
Esta estrategia surge tras la fusión de Cushman & Wakefield y DTZ. La compañía resultante mantiene el nombre de la primera, aunque los nuevos dueños eran los de DTZ.
Exor, sociedad de la familia Agnelli (los dueños de Fiat y Ferrari), vendió Cushman & Wakefield a TPG (y a los fondos PAG y OTPP), por 2.000 millones de dólares (1.845 millones de euros). TPG es dueño de decenas de compañías por todo el mundo, por ejemplo, Burger King.
La inmobiliaria fue fundada en Nueva York (EE UU) en 1917. En este siglo, ha cambiado varias veces de propietarios. Antes de los Agnelli, estaba controlada por la familia Rockefeller.
Tras la fusión, la consultora con sede en Chicago, cuenta con 5.000 millones de dólares (4.600 millones de euros) en ingresos, 43.000 empleados, y 176.000 millones de euros en volumen de operaciones en las que ejerce como intermediario. “Es una operación diseñada para convertirnos en el número uno”, destaca Barrachina, una posición por la que compite con JLL y CBRE. Asimismo, tras este movimiento corporativo, Asia toma mucho más protagonismo.
Oportunidades en España
“Contamos con más de 1.000 millones para nuevas inversiones”, asegura Barrachina. Actualmente, los responsables de la consultora están repensando y diseñando la estrategia de crecimiento, en la que se prevén adquisiciones de rivales, para contar con un plan de negocio en 2017. “Estamos en una fase muy preliminar. También veremos oportunidades para compras en España”, añade.
En España, DTZ era de un tamaño menor, lo que ha sumado una décima parte del negocio del que cuenta Cushman & Wakefield. La consultora dispone de un potente área de locales comerciales, sobre todo en Barcelona, y en inmuebles de oficinas. “No estamos en el sector hotelero. Es algo que nos podemos plantear”, apunta. También ven una oportunidad en las rehabilitaciones de edificios residenciales emblemáticos.
Respecto al sector inmobiliario en España, Barrachina ve una buena oportunidad de inversión, aunque reconoce que cada vez hay que ser más selectivos, porque los grandes inmuebles y a buen precio escasean. No cree que haya un calentamiento de precios de los activos en el mercado, provocado por los nuevos inversores como las socimis, ya que asegura que la mejora de la economía acompaña y el capital está siendo muy exigente. “Los inversores son muy selectivos y buscan buenas ubicaciones”.
Para este directivo, el crecimiento del sector es sólido porque los fundamentales de la economía ya han tocado suelo y no se espera un cambio de ciclo. Además, señala que hay liquidez en el mercado y los bancos están de nuevo dispuestos a financiar operación inmobiliarias.
Pero avanza que la tasa de disponibilidad de activos de calidad en grandes ciudades como Madrid y Barcelona van a la baja, sin nueva oferta disponible, por lo que cree que es previsible que crezcan las rentas que se cobran a los inquilinos en oficinas y centros comerciales.