Las empresas españolas, en alerta ante la devaluación del peso argentino
El ministro argentino de Hacienda y Finanzas, Alfonso Prat-Gay, anunció ayer el fin del denominado cepo cambiario. La eliminación de las restricciones en los tipos de cambio era una de las promesas del nuevo presidente, Mauricio Macri. Una medida de gran calado para el conjunto de la economía del país austral que, en cualquier caso, va a provocar una devaluación del peso argentino.
El tipo de cambio del peso frente al dólar se situaba ayer antes del anuncio del Gobierno argentino en 9,8225 unidades, si bien en el mercado negro llegó a superar las 14,63 unidades. Una vez eliminadas las citadas restricciones, el tipo oficial pasará a oscilar en un rango entre 13,5 y 15 pesos por dólar, según los analistas citados por Reuters.
En este sentido, Morgan Stanley prevé un tipo de cambio medio del peso argentino frente al euro de 15,50 unidades en 2016, 16,50 en 2017 y 17,33 en 2018. La estimación del banco de inversión estadounidense para este 2015 es de 10,11 pesos argentino por euro.
Estos movimientos han puesto en alerta a las empresas españolas presentes en el país, por el impacto que pudiera tener para sus cuentas. Y la lista de compañías es muy larga. Telefónica, BBVA, Santander, Gas Natural, Mapfre, Abertis, NH, ACS, Inditex, Prosegur, Indra, OHL, Constructora San José, Codere, Técnicas Reunidas y Duro Felguera, entre otras, miran con atención al país austral.
En estas circunstancias, una de las empresas con mayor presencia en el mercado de consumo en Argentina es Telefónica. El país supone un 7% del beneficio operativo antes de depreciaciones y amortizaciones (oibda) del grupo Telefónica y en torno a un 8,3% de su volumen de negocio. Morgan Stanley, no obstante, rebaja los riesgos para la operadora. La entidad señala que Argentina supone un 2,5% del valor de empresa (enterprise value) del conjunto del grupo español, puesto que ya incluye en su valoración de la teleco los efectos de una devaluación del peso. En la última conference call con inversores, Ángel Vilá, director financiero, indicó que Telefónica contaba en caja con cerca de 200 millones de euros, de ellos, en torno a 100 millones estaban en pesos y otro tanto en diferentes divisas.
Telefónica gestiona 26,4 millones de accesos en el país austral: 19,9 millones de líneas móviles, 4,7 millones de accesos tradicionales fijos y 1,9 millones de accesos minoristas de banda ancha. La empresa disparó los ingresos un 22,8% en el tercer trimestre.
A su vez, Banco Santander registró un beneficio en los primeros nueve meses del año de 274 millones de euros, un 17% más que en el mismo periodo de 2014. El banco destacó los crecimientos en créditos y depósitos. La entidad financiera continuó con su plan de expansión con la apertura de 37 nuevas sucursales entre enero y septiembre, alcanzando las 141 sucursales “totalmente transformadas”.
BBVA registró en Argentina un beneficio atribuido de 197 millones de euros entre enero y septiembre, un 32,5% más que en el mismo periodo del ejercicio anterior (un 22,3% más a tipos constantes). El margen neto se situó en 461 millones, un 25% más (un 15,5% más a tipos constantes). La entidad destacó en el informe del tercer trimestres que Argentina presentó un importante incremento en todos sus márgenes, gracias al dinamismo de la actividad y a la defensa de los diferenciales, lo cual compensa un mayor nivel de gastos ligados a la evolución de la inflación.
Ninguno de estos grupos ha querido hacer comentarios sobre este movimiento de las autoridades argentinas.
El denominado cepo cambiario hace referencia a una serie de restricciones impuestas durante los últimos años de Gobierno de Cristina Fernández, que dieron lugar al florecimiento de un mercado negro de divisas, con un tipo de cambio para el dólar muy superior al oficial. Con este movimiento, Mauricio Macri quiere facilitar el acceso a dólares a empresas y personas particulares. El nuevo presidente quiere impulsar las exportaciones de las empresas argentinas, con gran presencia en el segmento de materias primas.
Presencia española en múltiples sectores
Abertis: opera dos autopistas a través de su filial Ausol (Panamericana y General Paz), con un total de 119 kilómetros, y otra a través de GCO (Buenos Aires-Luján), con 56 kilómetros. En la presentación de los resultados del tercer trimestre, la compañía citó a la inflación en Argentina como una de las causas del aumento del 8% de los costes operativos. La empresa destacó que sus costes operativos aumentan un 8,8% por los gastos relacionados con la puesta en marcha del plan de eficiencia (indemnizaciones), el incremento del negocio de las actividades telemáticas y la inflación en Argentina.
Gas Natural: la compañía española registró en Argentina un ebitda en los nueve primeros meses del año de 35 millones de euros (un 250% más), cifra que supone en torno a un 0,9% del total del grupo. A la conclusión de 2014, su filial Gas Natural BAN distribuía gas natural en un total de 30 municipios de la zona norte y oeste de la provincia de Buenos Aires y a cuatro provincias del noreste del país, atendiendo a más de 1,8 millones de clientes.
Mapfre: la aseguradora señaló en la presentación de las cuentas del último trimestre que las primas emitidas y aceptadas por las aseguradoras gestionadas en Argentina alcanzaron los 282,8 millones de euros en los nueve primeros meses del año, un 24,7% más (un 19,3% en moneda local). En términos globales, la empresa destacó el crecimiento registrado por el negocio de automóviles en el país austral.
NH: la cadena española cuenta con 13 hoteles en Argentina, con un total de 2.050 habitaciones. De ellos, 11 son en propiedad y otros dos establecimientos en régimen de gestión. En la presentación de las cuentas del tercer trimestre, la empresa señaló que los gastos operativos en su negocio americano aumentaron en dos millones de euros (+15,5%), principalmente por el efecto de la inflación en Argentina y el efecto del tipo de cambio. También explicó que esta unidad de negocio registró un ebitda de 3,2 millones, frente a los 4,4 millones del año anterior, un descenso explicado en su totalidad por el menor ebitda de Argentina (-1,1 millones de euros).