El Ibex perseguirá los 11.800 puntos el próximo año
La cartera modelo para 2016 estaría compuesta por Acerinox, ACS, BBVA, DIA, Grifols/P e Iberdrola El comportamiento será dispar en las materias primas aunque con tendencia a la estabilización
Las expectativas de crecimiento económico en España y la previsible continuidad en la depreciación del euro serán claves para el impulso de la Bolsa en los próximos dos años, cuyo precio objetivo en 2016 podría alcanzar hasta los 11.800 puntos.
Esta es una de las conclusiones de Ahorro Corporación, que ha presentado este lunes sus previsiones macroeconómicas y la evolución de los mercados financieros de cara al próximo año, en las que se muestran positivos apoyados en las elecciones del próximo 20 de diciembre.
Según ha destacado la gestora, el mercado español, que ha sido penalizado por la incertidumbre política en 2015, "recuperará terreno tras la formación de un gobierno en coalición entre el Partido Popular y Ciudadanos", lo que "despejará las dudas de cara al próximo ejercicio".
Pese a ello, Ahorro Corporación no apuesta por ningún sector aunque revela cuál es su cartera modelo para 2016, compuesta por Acerinox, ACS, BBVA, DIA, Grifols/P e Iberdrola. Esto se debe a que otros actores pueden seguir afectando a la economía española. Entre ellos, la gestora ha explicado que Brasil seguirá en el punto de mira debido a los problemas que arrastra por la crisis política, aunque apuestan por México como país emergente.
Respecto a las materias primas, se prevé un comportamiento dispar durante el próximo año aunque con tendencia a estabilizarse. Para ello, el precio del petróleo será clave y en él Arabia Saudita seguirá sin recortar oferta, aunque se espera que se produzcan "subidas progresivas en los precios", pese a alcanzar mínimos de hace siete años en estas últimas semanas.
Para la gestora, el precio del barril alcanzará a final del año que viene los 55 dólares. No obstante, explican que otras compañías como Endesa o Repsol elevan este precio hasta los 63 y 65 dólares, respectivamente.
Esta estabilización en las materias primas contribuirá a reducir los niveles de deflación, lo que estará impulsado, además, por el crecimiento real de la economía. En este sentido, tras estimar un crecimiento del 3,1% para 2015, se espera que en 2016 este alcance el 2,6% y el 2,3% en 2017. La razón por la que el crecimiento se moderará en los próximos años, es, según aclara la gestora, que en 2016 los vientos de cola coyunturales de los que ha disfrutado España durante este año (abaratamiento del coste energético, depreciación del euro o alivio del ajuste fiscal) se reducirán.
No obstante, también explican que, pese a que la economía española está recuperando terreno perdido, todavía presenta una brecha de producción negativa mayor que en el conjunto de Europa, por lo que cabe esperar crecimientos superiores a la media al menos en los dos próximos años. Así, aclaran que la Eurozona ha superado ya en un 1,2% los niveles previos a la crisis y España se encuentra aún un 4,6% por debajo.