Récord exportador por la recuperación de la zona euro
El déficit comercial, que mide la diferencia entre las exportaciones y las importaciones de bienes, tocó mínimos históricos a finales de 2013, con un importe de 11.154 millones de euros. A partir de esa fecha comenzó una escalada que le llevó a rozar los 19.000 millones de euros en 2014 y que se ha frenado a lo largo de este ejercicio. Entre enero y septiembre de este año, el déficit fue de 18.642 millones de euros, lo que representa un 1,1% menos que en el mismo período de 2014, según los datos hechos públicos por el Ministerio de Economía. En la consecución de este hito ha ayudado por un lado el crecimiento de las exportaciones y por el otro la desaceleración de las importaciones. Las ventas de bienes al exterior han crecido un 4,4% gracias a dos factores: la consolidación del crecimiento en la zona euro y la debilidad del euro frente al dólar, lo que ha servido para consolidar el avance de las exportaciones a Reino Unido y EEUU.
Eurostat, la oficina de estadística de la Comisión Europea certificó la semana pasada que las 19 economías que integran la zona euro crecieron un 1,6% anual en el tercer trimestre en comparación con el mismo de 2014. Se trata del ritmo de crecimiento más alto desde 2012, gracias a la mejoría experimentada por las tres grandes economías de esa región (Alemania, Francia e Italia). Por su parte, el euro sigue depreciándose en su relación contra el dólar (ayer cotizaba a 1,06 dólares, lo que supone acercarse a 1,04, el mínimo de 15 años alcanzado en marzo). Ambos factores han sido determinantes para el empuje de las ventas al exterior: estas han crecido un 5,4% a la zona euro, un 7,2% a Reino Unido y un 12,4% a EEUU, todos por encima del 4,4% de la media en los nueve primeros meses del año.
Ambos factores también han servido para contrarrestar la debilidad de algunos países que en los anteriores trimestres habían experimentado fuertes crecimientos en las compras a España. Es el caso de Asia, destino en el que el avance de las exportaciones se ha limitado a un 0,1% anual por el ajuste de las ventas a Japón (-7,1% anual) y a Corea del Sur (-11,1%). Aunque en volumen son insignificantes, las ventas a Singapur y Taiwan, dos países considerados prioritarios por la Secretaria de Estado de Comercio, han sufrido correcciones superiores al 30%. En el de Latinoamérica, las compras de los países del Mercosur como Venezuela o Brasil han caído con fuerza en paralelo a la recesión de ambos países. Las exportaciones a Brasil (el segundo mercado más importante de la zona tras México) han descendido un 8,8% anual y las de Venezuela lo han hecho un 27,3%. “Las ventas a la UE se siguen comportando bien, pero se han producido saldos muy inferiores en el resto del mundo, salvo en Canadá, México y Chile”, apuntó el secretario de Estado de Comercio, Jaime García-Legaz. En su opinión, ese ajuste se ha producido por la caída de los precios de las materias primas “que ha producido un empobrecimiento de muchos países que está impactando en sus importaciones, esto es, las exportaciones españolas. Los países de Oriente Medio han reducido sus ingresos petroleros, lo que está impactando en el ritmo de avance de sus infraestructuras y, en consecuencia, en las compras de bienes de equipo a España”, señaló.
El efecto del petróleo barato
El abaratamiento del petróleo también ha servido para contener el crecimiento de las importaciones, que habían sido determinantes en el deterioro del déficit comercial. Las compras de bienes crecieron un 3,9% hasta septiembre con un comportamiento diferenciado por productos. Por un lado, los ligados a bienes de equipo y automoción subieron a tasas del 18%, mientras que los vinculados a la compra de petróleo (España compra el 99% de la energía que consume) cayeron un 32%. En septiembre de 2014, el barril de Brent cotizó a una media de 76,4 euros por barril; doce meses después bajó a 43,2 euros, lo que representa una corrección del 44,5%.
Bienes de equipo, automoción y alimentos
La estadística de la Secretaría de Estado de Comercio analiza la evolución mensual de la base exportadora, compuesta por las empresas que venden bienes a terceros países. Entre enero y septiembre se contabilizaron 124.637 compañías, lo que supone un 0,3% menos que en el mismo período de 2014.
Un dato que se ve compensado en parte por el crecimiento de las empresas denominadas exportadoras regulares (aquellas que vende bienes al exterior durante cuatro años consecutivos). En los nueve primeros meses del año crecieron un 3,9% hasta las 46.325 firmas.
En ambos casos, la estadística está protagonizada por los tres sectores más vendedores(bienes de equipo, automoción y alimentos), que también lideran la clasificación de las importaciones. “Esto habla de una modernización y recapitalización de esas empresas”, apuntó García-Legaz.