_
_
_
_
El miedo por la alerta terrorista vuelve a dañar a las aerolíneas

El Ibex 35 cede un 1% y pierde los 10.300 puntos

Un inversionista de valores revisa el índice de valores en un teléfono.
Un inversionista de valores revisa el índice de valores en un teléfono. EFE

Después de las exuberantes subidas de ayer, los inversores han dadoun paso atrás, en parte por la lógica toma de beneficios tras el inesperado rally de la sesión precendente y también en parte por la creciente tensión ante la alerta terrorista enEuropa. Así, todas las Bolsas del Viejo Continente se han anotadodescensos, aunque estos se moderan sensiblemente por la apertura alcista de Wall Street, donde Apple, que sube más de un 3%, ejerce de catalizador gracias a una mejora de recomendación de Goldman Sachs. El selectivo S&P avanza un 0,6%. 

El paso del Ibex 35 por los 10.300 puntos ha sido fugaz. Visto y no visto. El selectivo español ha llegado a descender más de un 1,2%, aunque al cierre baja un 0,99% hasta los 10.261,1 puntos básicos. El mejor valor de la sesión es ArcelorMittal, que se revaloriza un 4,35% y el peor, IAG, que baja un 3,11% igual que el resto del sector. Las otras Bolsas europeas se han anotado caídas similares que, al igual que sucedió en la sesión del lunes tras los atentados yihadistas, han ido de más a menos.

La incertidumbre generada por las nuevas alertas terroristas se ha dejado sentir, otra vez, en las aerolíneas y en las compañias turísticas. El sector de firmas de viajes y tiempo libre del Stoxx 600 desciende un 0,49%, entre noticias sobre la operación policial contra los yihadistas en París y el desvío de dos aviones de Air France por una amenaza terrorista provocó nerviosismo en los mercados. Esta compañía desciende un 0,9% en el parqué y la cadena gala de hoteles Accor se deja un 1,2%. También han bajado, entre otras, la británica Easyjet (–1,35%), la alemana Lufthansa (–1,3%).

El miedo a que la amenaza terrorista afecte al turismo han jugado en contra de las aerolíneas, al igual que las subidas del precio del petróleo. La volatilidad del oro negro sigue siendo enorme. Hoy se ha conocido el dato de reservas semanales de crudo en Estados Unidos, que ascienden hasta los 250.000 barriles, frente a los dos millones que esperaba el consenso del mercado.Tras la publicación de la cifra, el barril de petróleo Brent sube un 0,5% y el West Texas, de referencia en Estados Unidos, recupera apenas un 0,1%. Ambos rondan su mínimo desde 2009, que marcaron en agosto.

El resto de materias primas también continúa bajo presión, dañadas por el dólar fuerte y el temor a una menor demanda global. El cobre, el oro y la plata cotizan en mínimos desde 2009. Ante este panorama, el índice de commodities de Thompson Reuters vuelve a bajar hoy un  0,27% y se mueve en su nivel más bajo desde 2002.

Hay otros factores que mueven al mercado e invitan a la cautela, pese a la efusividad de las compras de la sesión precedente, que parecía anticipar el comienzo del clásico rally de fin de año en las Bolsas.Como recuerdan desde Carax–Alpha Value, “a la desaceleración en China, la subida de tipos prevista en Estados Unidos para el 16 de diciembre, las débiles cifras micro económicas del tercer trimestre y las tensiones en la periferia europea (Portugal, Grecia y España), se unen la recesión ténica de Japón y el incremento de las tensiones terroristas”. Por eso, indican, lo normal es que aumente la tensión y la volatilidad en los mercados. Esta tarde, a las 20 horas, ya con las Bolsas europeas cerradas, se conocerán las actas de la última reunión del Comité Federal de Mercado Abierto de la Fed.

Otro activo que vigilan muy de cerca los analistas es el euro. La moneda única se ha estabilizado hoy por debajo de los 1,07 dólares, nivel que no perdía desde abril. Desde un punto de vista técnico, esto implica la pérdida de un soporte, por lo que podría caer hasta las 1,058 unidades del billete verde, su próximo suelo.

Muchos analistas prevén que la moneda única llegue a la igualdad con el dólar en los próximos meses. Los expertos de Barclays van incluso más lejos y prevén que el euro se siga depreciando y caiga hasta los 0,95 dólares en el tercer trimestre de 2016. La clave estará en lo que decidan en sus proximas reuniones el BCE, del que el mercado espera que recorte la facilidad de depósito y aumente su plan de compra de deuda el 3 de diciembre, y la Fed, cuyo Comité de MercadoAbierto se reúne el próximo 16 de diciembre.

“Si tanto el BCE como la Fed decepcionan las expectativas del mercado en sus reuniones de diciembre, el euro podría subir hasta los 1,12 dólares”, explican desde Barclays. Si, por el contrario, el BCE va incluso más lejos de lo que espera el mercado y el organismo presidido por Janet Yellen aprueba la subida de los tipos de interés el próximo mes, “un tipo de cambio de un euro por 0,9 dólares es factible”.

También las divisas emergentes siguen de capa caída frente al dólar. El real brasileño, por ejemplo, cae más de un 30% en el año frente al dólar y cotiza en mínimos históricos. Según Brian Hess, estratega de renta fija global de Loomis Sayles, muchas divisas emergentes cotizan ya infravaloradas en comparación con su media histórica. “Esto puede apoyar la competitividad de sus exportaciones a pesar de que también hayan caído las divisas de otras grandes naciones exportadoras como Alemania, China o Japón, porque en este caso la depreciación ha sido inferior”, destaca.

En el mercado secundario de deuda, pocas novedades. El interés del bono español con vencimiento a diez años baja ligeramente hasta el 1,73%, con la prima de riesgo en los 122 puntos básicos. Mañana, el Tesoro vuelve a acudir al mercado con una subasta de bonos. En concreto, el organismo público intentará captar entre 3.000 y 4.000 millones en bonos a tres y cinco años, y obligaciones que vencen el 31 de enero de 2013. En su anterior emisión, celebrada ayer, España cobró por su deuda a un año por primera vez. 

Más información

Archivado En

_
_