Telefónica se alía con BQ para frenar a Google en el móvil
Telefónica da un paso más en su particular cruzada contra Google en el negocio móvil. La operadora se ha aliado con BQ y mañana anunciarán en Madrid el lanzamiento de un smartphone que llevará Cyanogen OS, una versión de Android que permite prescindir de los servicios de Google a la hora de configurar el equipo.
Ni la operadora ni BQ han querido avanzar detalles sobre el anuncio pero fuentes conocedoras del proyecto indican a CincoDías que el nuevo teléfono no solo se comercializará en España, sino también en otros mercados europeos donde la teleco y el fabricante de móviles tienen presencia. Concretamente, en Alemania y Reino Unido. Se prevé que el nuevo teléfono se venda a través de las diferentes marcas de Telefónica con sus ofertas convergentes y sin ellas.
El lanzamiento de este móvil con el sistema operativo de la empresa estadounidense Cyanogen es una muestra más del interés de Telefónica por impulsar una plataforma que frene el poder de Google en el negocio móvil, pues según la consultora IDC en el segundo trimestre de 2015 Android amasó una cuota de mercado mundial del 83%. “Telefónica ha encontrado un socio atractivo en Cyanogen porque es la forma de que Android no esté dominado por los servicios de Google. Actualmente, esta impone a los fabricantes de móviles que utilicen por defecto sus servicios (Gmail, Google Map, su buscador, su navegador Chrome…), lo que le da ingresos y poder. Ahora con Cyanogen OS, un Android libre, esto cambia”, dicen fuentes del mercado.
Ventajas en la privacidad
El terminal que presentan BQ y Telefónica se llama Aquaris X5 Cyanogen, y tiene características y precio similares al Aquaris X5, lanzado por BQ el pasado 14 de octubre. Este modelo tiene cuerpo metálico, pantalla de 5 pulgadas, procesador Qualcomm Snapdragon 412 de cuatro núcleos y cámara trasera de 13 megapixeles. Su precio de partida es de 209 euros. Los clientes de Movistar también podrán financiarlo a 24 meses sin intereses por 8,70 euros al mes. Sin duda, una ventaja del terminal es que al utilizar Cyanogen hace mucho más fácil gestionar la privacidad al usuario.
El anuncio con BQ llega después de que el pasado abril se conociera que Telefónica y el banco Santander habían participado en una ronda de financiación de 73 millones de euros para impulsar Cyanogen, que ya cuenta con 50 millones de usuarios activos (más que Windows Phone y Blackberry OS juntos) y unos 9.000 desarrolladores creando aplicaciones para esta plataforma.
Aunque ya hay otras iniciativas como Firefox (también apoyada por Telefónica) y Ubuntu para frenar el poder del duopolio Google-Apple en el móvil, Cyanogen tiene algunas ventajas sobre el papel. Ha logrado atraer a inversores de calado. Además de los citados, están Rupert Murdoch, Twitter Ventures, Qualcomm, el gigante chino Tencent holding, Andreessen Horowitz, Access Industries y los fondos Index Ventures y Premji Invest; la empresa ha recibido hasta la fecha un total de 110 millones de financiación.
Por otro lado, además de contar con el apoyo de algunos fabricantes de móviles como la india Micromax o Alcatel, Cyanogen tiene un aliado importante: Microsoft. El gigante de Redmond también está interesado en que este Android alternativo crezca para impulsar sus propias aplicaciones y hace unos meses anunció una alianza estratégica con Cyanogen para integrar algunas de sus apps y servicios (OneDrive, OneNote, Skype o su asistente de voz Cortana) directamente en Cyanogen OS y reemplazar así a los de Google.
Otra ventaja de Cyanogen es que al estar basado en Android, el usuario no se enfrenta a un cambio radical en su experiencia de uso y puede utilizar todas las aplicaciones de la tienda del sistema operativo de Google, como las populares WhatsApp o Candy Crash.
Una estrategia que da más libertad al usuario
El respaldo de telefónica a Cyanogen es lógico pues busca opciones para competir con Apple y Google y reducir así la fuerza negociadora de estos. Pero habrá que ver el éxito que alcanza, visto el lento recorrido de Firefox o Ubuntu. En este contexto, el reto para Cyanogen está en convencer a los grandes fabricantes para que lancen terminales con su sistema operativo en todo el mundo. De momento, BQ se convierte en uno de sus aliados. El fabricante español, que cerró 2014 con una cuota casi del 6% en el mercado español y fue tercero en el segundo trimestre de 2015, solo por detrás de Samsung y Huawei, parece apostar por dar más libertad al usuario. También Telefónica.
BQ, que facturó 202 millones en 2014, también fue la elegida por Google para que lanzar el pasado septiembre el primer smartphone con Android One (una versión pura del sistema operativo de Google) fuera de los países emergentes. Poco antes, en el mes de febrero, la firma también lanzó al mercado el primer móvil que salía de fábrica con Ubuntu en todo el mundo, tratando de poner la semilla para que haya alternativas al duopolio Apple-Google.