Alemania parece resistir (no sabemos hasta cuando).
El indicador IFO de confianza de los empresarios alemanes, elaborado por el instituto con base en Múnich del mismo nombre, bajó ligeramente en octubre hasta los 108,2 puntos, desde los 108,5 del mes anterior.
El índice de confianza empresarial IFO se basa en las respuestas que dan unas 7.000 empresas de los sectores manufacturero, construcción, ventas mayoristas y minoristas. El dato de octubre es la primera caída en cuatro meses, sin embargo ha sido interpretado de manera positiva dado que ha batido las previsiones de los analistas que, de media, esperaban un descenso hasta los 107,8 puntos.
Por subíndices, el de expectativas mejoró 0,5 puntos hasta los 103,8 mientras que el que evalúa la situación actual descendió 1,4 puntos hasta los 112,6.
De hecho el reconocido y muchas veces controvertido presidente del instituto IFO, Hans-Werner Sinn, indicó que "La economía alemana muestra resistencia en vista de los numerosos desafíos de otoño". Este es el primer indicador de expectativa elaborado con el pleno conocimiento del escándalo de Volkswagen y, de momento, todo apunta a que no ha tenido impacto en la industria automovilística germana.
No obstante, las expectativas del sector exportador se vienen debilitando desde mediados de año. Si bien es verdad que la causa de ello puede ser la fortaleza del EUR, quizás (debido a que el EUR esta especialmente infravalorado para la economía alemana y que las exportaciones no son tan sensibles al precio ) es de suponer que serán más importante las dudas sobre la marcha de las economías emergentes en las expectativas del sector.
Por contra sectores como el de servicios y la situación del mercado laboral continúan siendo fuente de buenas noticias. Ambos indicadores están en máximos (o en niveles muy cercanos a ellos) pero sobretodo por encima de los niveles alcanzados antes de la crisis del 2008.
Por otro lado, en los EEUU, la venta de vivienda nueva cayó el pasado mes de septiembre un 11,5%, hasta las 468.000 operaciones (anualizadas). Se trata de la cifra de ventas de vivienda nueva más baja desde noviembre de 2014, cuando se alcanzaron 449.000 operaciones. Sin embargo, en términos interanuales la cifra supone un aumento del 2%. Adicionalmente, el dato de agosto fue corregido a la baja hasta los 529.000 (552.000 en la estimación inicial) y se esperaban para septiembre 545.000 operaciones.
Preocupa el reciente estancamiento en las venta de nuevas viviendas en el rango 450.000-550.000 desde agosto del año pasado toda vez que las nuevas construcciones y los permisos de construcción mantienen últimamente una racha alcista. El gap debe cerrarse en algún momento o bien con una aceleración de las ventas de nuevas viviendas o bien con una caída de las nuevas construcciones (y/o permisos)
En contra debió jugar el hecho de que el precio medio de venta de tales inmuebles durante el mes de septiembre aumentó un 6% (hasta los 364.000$) con respecto al mismo dato del mes anterior. La mediana del precio (296.900$) subió algo menos, un 2,12%.
Ambos precios se encuentran a apenas un 5,47% del máximo alcanzado en el precio medio (384.000$ en octubre de 2014) y el 1,95% en el caso del precio mediano (302,700$ en noviembre de 2014). Se da la paradoja de que las ventas de nuevas viviendas han caído un 60% desde enero del 2006 (máximo del ciclo) pero el precio medio se han incrementado un 21,0% en el mismo periodo (un 21,2% el precio mediano).
El inventario de viviendas nuevas, este alcanzó en septiembre un total de 225.000 inmuebles, lo que supone 5,8 veces la demanda, desde 4,9 veces en agosto.
Por último, el EUR se estabiliza por encima de los 1,10 USD/EUR a la espera de la reunión del FOMC de mañana. La atención, como siempre, estará en el mensaje y las indicaciones sobre cuando tendrá lugar la primera subida de tipos de interés. Cuanto más apreciado esté el USD más se pospondrán finalmente las subidas de tipos.