La torre del BBVA tiene nuevo nombre: Castellana 81
GMP, propietario del rascacielos, ha bautizado al emblemático edificio como Castellana 81. OHL se encargará de las obras, que concluirán a finales de 2016
La histórica torre del BBVA comienza su segunda vida. Tras la mudanza de los empleados de la entidad financiera a la nueva sede en Las Tablas (Madrid), el emblemático edificio del Paseo de la Castellana se va a remodelar y por primera vez en su historia busca un nuevo inquilino.
GMP, que compró al banco el edificio en 2007, presentó ayer la rehabilitación de la torre, a la que han rebautizado como Castellana 81. La inmobiliaria invertirá en la reforma 30 millones de euros. Está previsto que el lavado de cara concluya a finales de 2016.
La torre fue diseñada en 1971 por Francisco J. Sáenz de Oiza, arquitecto que recibió el Premio Príncipe de Asturias de las Artes. Se construyó en Azca entre 1978 y 1981 como sede del Banco Bilbao.
El diseño de la reforma se ha adjudicado ahora a la firma Ruiz Barbarin Arquitectos-Arquimanía y de las obras se encargará OHL.
Las actuaciones prevén un plan de renovación de los espacios interiores e instalaciones, así como un programa de medidas para mejorar la eficiencia del inmueble, para reducir el consumo energético y de agua hasta en un 50%, según el propietario. Contará con 2.000 metros cuadrados destinados a distintos servicios para las futuros empleados.
La torre tiene 107 metros de altura, distribuidas en 28 plantas de oficinas, y 38.000 metros de superficie. BBVA permanecerá solo en una pequeña parte, en las plantas superiores, ocupando 6.000 metros para despachos, un área que de momento no será reformada. El edificio mantendrá en la parte exterior el letrero de BBVA. Será en la parte inferior la que sea ocupada por un inquilino o varios.
Las consultoras CBRE y Aguirre Newman han sido seleccionadas por GMP para buscar el inquilino. “Alguna gran empresa de reconocido prestigio ha manifestado ya interés en el edificio”, asegura Xabier Barrondo, director general de negocio de GMP, una empresa que está participada por GIC, el fondo soberano de Singapur. “Castellana 81 es un edificio de oficinas único en Madrid por su singularidad, privilegiada ubicación”, añade.
El edificio seguirá contando con un auditorio, de capacidad para más de 200 personas, además de nuevas instalaciones como un centro de reuniones, duchas, vestuarios, servicio de fisioterapia, puntos de recarga para vehículos eléctricos, aparcamiento de bicicletas y cafetería.
Más cambios en Azca
La reforma de la histórica sede de BBVA se suma a los múltiples cambios y mudanzas en la zona de Azca. GMP también rehabilita actualmente el conocido como edificio Ederra, antigua sede del grupo Saint Gobain.
Por ejemplo, casi colindante a estos edificios se encuentra la nueva torre Titania, construida por El Corte Inglés en el solar del calcinado edificio Windsor. El principal candidato para estrenar el flamante rascacielos es la consultora EY. A su vez, la multinacional abandonaría Torre Picasso, propiedad de Amancio Ortega, fundador de Inditex, donde dejaría disponibles 15.000 metros cuadrados.
La consultora KPMG, por su parte, traslada su sede a la Torre Cristal, al Norte del Paseo de la Castellana, y abandona Torre Europa, propiedad de Infinorsa, un dueño que también tiene planeado lavar la cara a este inmueble frente al Santiago Bernabéu.