Los emprendedores se quejan de la falta de implicación de las administraciones
Siete de cada diez empresarios consideran que no reciben un trato adecuado por parte de los gobiernos
Los emprendedores españoles reclaman una mayor implicación por parte de las administraciones públicas. De hecho, siete de cada diez empresarios considera que no recibe el apoyo adecuado por parte de los gobiernos y que en el último lustro no ha habido grandes variaciones en lo que respecta a las ayudas recibidas.
Los propios emprendedores se ven a si mismo como los menos respaldados por su país, seguidos por Francia, como recoge el Estudio Hiscox ADN del emprendedores sobre el perfil del empresario español.
Tampoco el 41% considera que vaya a haber cambios significativos para el sector después de las próximas elecciones generales. La mayoría cree que todo continuará más o menos igual. Y es que para nueve de cada diez encuestados, la burocracia gubernamental es el mayor obstáculo que se pueden encontrar a la hora de emprender, reconociendo además que el actual sistema de impuestos tampoco ayuda mucho a las personas que desean montar un negocio por su cuenta.
A la hora de buscar responsables sobre la escasa capacidad emprendedora de los españoles, el 85% se fija en el sistema educativo del país, en donde no se fomentan las ideas y sueños individuales. Algo más de la mitad, en concreto el 65%, cree que los ciudadanos no se deciden a emprender para no asumir riesgos.
Medidas que favorezcan el emprendimiento
Hay una serie medidas que los encuestados en este estudio destacan para fomentar el espíritu emprendedor, que incluyen entre otras cosas suavizar las leyes laborales, rebajar los impuestos directos a empresas, dar más facilidades para la obtención de créditos, además de conseguir unas relaciones más fluidas entre el empresario y las administraciones a través de una simplificación de la normativa contable.
Los trámites que deben realizar los emprendedores supone para ellos un verdadero dolor de cabeza. De momento todas las gestiones relacionadas con la administración de la compañía les lleva a gastar entre dos y tres horas semanales. Esto incluye todo lo asociado a impuestos, leyes laborales, etc. El dato más positivo es que de un año para otro este tiempo va disminuyendo.