Nokia lleva a Microsoft a su récord histórico de pérdidas
Microsoft ha registrado en el cuarto trimestre de su ejercicio fiscal pérdidas por un importe récord de 3.195 millones de dólares (2.958 millones de euros) como consecuencia principalmente del deterioro del valor de los activos de Nokia que adquirió el gigante de Redmond, frente al beneficio neto de 4.612 millones de dólares (4.270 millones de euros) en el mismo periodo de su anterior año fiscal.
El mayor fabricante mundial de software ha precisado que sus cuentas del último trimestre reflejan un impacto negativo de 7.500 millones de dólares (6.945 millones de euros) por el deterioro del valor de los activos de Nokia adquiridos por Microsoft el año pasado.
Asimismo, la compañía propietaria de Windows asumió cargas de reestructuración por importe de 780 millones de dólares (722 millones de euros), así como de otros 160 millones de dólares (148 millones de euros) en relación con el plan de reestructuración previamente anunciado por Microsoft.
A principios de julio, Microsoft había anunciado que sus resultados del cuarto trimestre asumirían el impacto de estas cargas por depreciación de activos, así como el recorte de hasta 7.800 empleos, que se sumarían a la reducción de 18.000 empleos del año anterior.
Por su parte, la cifra de negocio de Microsoft en el cuarto trimestre de su año fiscal se situó en 22.180 millones de dólares (20.537 millones de euros), un 5,1% menos.
En concreto, los ingresos por licencias disminuyeron un 34%, después de que las ventas de Windows bajaran un 22%, las de Office un 42% y las de Windows Phone cayeran un 68%.
A su vez, el negocio de hardware para juegos y computadoras facturó un 44% más, gracias al incremento del 10% de Xbox y del 117% de Surface, mientras que los ingresos del área de hardware de telefonía móvil bajaron un 38%.
En el conjunto del año, Microsoft obtuvo un beneficio neto de 12.193 millones de dólares (11.290 millones de euros), un 44,7% por debajo del resultado del ejercicio anterior, mientras que su cifra de negocio creció un 7,8%, hasta los 93.580 millones de dólares (86.648 millones de euros).