Un referendum "mal curado"
El descalabro de las negociaciones entre Grecia y sus acreedores se transformó en un descalabro de los mercados. Curiosamente, el EUR ha sufrido bastante menos ya que a pesar de la caída en Asia ayer, cerró a un nivel superior que que tenía al cierre del viernes.
Salvo España y Portugal, la mayoría de bolsas de la Eurozona no sufría un desplome de la magnitud que vimos ayer desde principios de noviembre de 2011, curiosamente ligado a otro referéndum en Grecia, el que propuso el Primer Ministro Papandreu. Aquella cita (era para decidir si el país aceptaba o no las condiciones del segundo plan de rescate) no acabó produciéndose y Papandreu dimitió días más tarde.
La economía griega representa apenas el 2% del PIB de la UME, Pero a pesar de ello, el referéndum del próximo domingo es clave no solo por su repercusiones sobre otros países con más calado (léase España o Italia) sino porque se ha convertido en una consulta sobre la permanencia de Grecia en el euro, lo que traducido a lenguaje de mercado, podría llegar a significar una consulta sobre la supervivencia del proyecto.
Las bolsas más afectadas fueron las de los países de la periferia europea: Lisboa (-5,22%), Milán (-5,17%) y el IBEX-35 (-4,56%). El resto de índices de la UE cayeron menos pero sus perdidas recuerdan a las habidas con la convocatoria del referéndum en noviembre de 2011. Al otro lado del Atlántico también se vieron los efectos de la incertidumbre. Incluso China, cuya bolsa caía con fuerza antes del viernes se ha visto afectada a pesar de que el Banco de China ha reducido los tipos de interés en un intento de aminorar las pérdidas. Hoy ha subió más de un 5%
A estas alturas es prácticamente imposible que Grecia cancele el referéndum y desconocemos a qué condiciones se refiere exactamente la pregunta del referéndum, ya que ha habido varios borradores rechazados.
Hoy vence el pago de 1.600 mill.€ al FMI y ya ha avisado el gobierno griego que no se producirá.
El BCE ha dicho que esta "listo para considerar" la posibilidad de volver a financiar a los banco griegos.
Pese al evidente malestar con Atenas, El Presidente de la Comisión Europea Juncker, aseguró ayer que la puerta sigue abierta para intentar alcanzar un acuerdo. “Este no es un estúpido plan de austeridad. No hay recorte de pensiones ni de salarios”, enfatizó claramente enfadado.
El presidente comunitario ha asegurado también que existía un compromiso para hablar de la reestructuración de la deuda griega, la principal demanda de Syriza, en otoño y que Tsipras lo sabía.
En un intento por alcanzar un acuerdo sobre el rescate (que hoy expira), Juncker ha hecho una oferta de última hora a Atenas, cuyos detalles se desconocen, pero al que el primer ministro griego, Alexis Tsipras, tendría que enviar su aceptación por escrito de que hará campaña a favor del 'Sí' en el referéndum que se celebrará en el país el 5 de julio.
En caso de que la oferta sea aceptada por Grecia, el Eurogrupo podría adoptar un comunicado que afirme que el compromiso de 2012 sobre considerar extender el vencimiento de préstamos, rebajar los intereses y extender la moratoria del pago de intereses sería aplicado en octubre.
Nunca una "calma", ha sido tan "nerviosa".