¿Cómo será la banca del mañana?
La tradición frente a la innovación. El negocio “de toda la vida” frente al avance de un negocio que está ligado a las nuevas tecnologías. El ayer y el hoy pero sin dejar de poner la vista en el mañana. La banca ha sufrido un sinfín de cambios, no solo debido al proceso de reestructuración que ha tenido que llevar a cabo –reducción de sucursales, fusiones y compras de entidades, rescates, despidos…-, sino debido también al esfuerzo que ha tenido y sigue teniendo que hacer para adaptarse a las necesidades de los clientes e implementar las nuevas tecnologías al negocio.
El canal digital ha marcado un antes y un después en el sector bancario. Asumir este hecho por parte de las entidades supondrá un punto de inflexión entre acompañar al crecimiento que está experimentando la banca y por lo tanto avanzar o bien estancarse en un modelo tradicional y que puede quedarse obsoleto de aquí a poco tiempo. La perfecta combinación entre tecnología y tradición será la clave.
El avance digital supone más agilidad
La incursión del mundo digital en la banca ha supuesto una auténtica revolución, tanto para los clientes como para el negocio en sí. La banca digital supone una nueva fuente de ingresos para el sector, a la vez que se produce un ahorro de costes y se consigue llegar a cada vez más gente y más mercados.
Es un modo de optimizar y simplificar las operaciones, ayudando a que éstas sean más ágiles para los clientes, sin tener que desplazarse a la oficina para realizar una transferencia o hacer un pago.
“A pesar de trabajar en el marco de una economía y una sociedad en transformación, los bancos siguen funcionando de una forma muy similar al pasado”, palabras de Francisco González, presidente de BBVA al presentar el libro Reinventar la empresa en la era digital en el que se aborda cómo la revolución tecnológica ha supuesto un reto para las entidades bancarias, ya que éstas deberán rediseñar su estrategia de negocio y los distintos procesos con el objetivo de reinventarse y cubrir un aspecto cada vez más importante como es el digital. Según Francisco González y haciendo referencia a esta necesidad de reinvención, si esto no ocurre por parte de las entidades, “muchos bancos tradicionales se van a quedar en el camino”.
Nuevo concepto de oficinas físicas
Enfocarse en lo digital pero sin dejar de lado la oficina bancaria. La sucursal es la forma más tradicional de acudir a la banca, pero también se adapta al nuevo panorama. El cliente busca en la oficina bancaria el asesoramiento personal en el momento en el que lo necesite, hecho que además valoran muy positivamente.
El cliente no abandona la sucursal y ahora ésta cambia. Las entidades se han propuesto estar más accesibles para sus clientes. El horario es una de las grandes batallas de las entidades. Bankia por ejemplo propuso sus oficinas ágiles, en las que poder realizar gestiones desde las 8.15h hasta las 18.00h de forma ininterrumpida, de modo que se amplía el horario para quienes no pueden acudir a una sucursal por la mañana. Además también es una opción que planea sobre las entidades que aunque la oficina se cierre al público a determinada hora, sus empleados sigan trabajando y atendiendo a personas con cita previa. Lo digital también llega a las sucursales gracias a cajeros automáticos con altas prestaciones desde los que operar de forma intuitiva.