Las farmacéuticas dan luz verde a medidas correctoras de gasto
La asamblea de Farmaindustria se compromote a que las empresas tomen medidas compensatorias si el gasto farmacéutico crece por encima del PIB
Reunida en asamblea extraordinaria, las compañías españolas y multinacionales agrupadas en Farmaindustria dieron la autorización para la firma de un protocolo con los ministerios de Hacienda y Sanidad para controlar el gasto farmacéurico.
Previsiblemente este acuerdo se firmará a finales de mes de mayo. En este documento se establecerá que el crecimiento del gasto farmacéutico público en 2015 no podrá superar el alza de la actividad económica. En el primer trimestre del año, el aumento del PIB se quedó en un 2,6% y al final de año, las previsiones del Gobierno lo sitúan en el 2,9%.
Ese será el margen en el que tenga que moverse el desembolso público en medicamentos. En el mes de marzo, según datos de Sanidad, el gasto en fármacos con receta aumentó un 4,09% (con un coste para las arcas públicas de 9.402 millones de euros en los últimos doce meses). Pero se desconoce cuánto se destina en tratamientos en los hospitales, porque ni el ministerio ni las comunidades autónomas ofrecen públicamente esta cifra. Algo que tendrá que hacerse transparente para las empresas tras la firma del protocolo.
Los mecanismos para controlar los posibles desvíos todavía se desconocen. Este acuerdo intenta evitar las medidas unilaterales del Ejecutivo para controlar el gasto, como ha sucedido desde mayo de 2010, cuando José Luis Rodríguez Zapatero introdujo el primer recorte al sector. Desde entonces se han sucedido diferentes recortes y descuentos en los precios. Por eso, la asamblea de la patronal da luz verde a un acuerdo que prevé articular “sistemas de monitorización trimestral del gasto”, señala la patronal en un comunicado, en el que todas las partes estarán informadas.
Hepatitis C, excluida
El pacto entre Hacienda y Farmaindustria deja fuera el gasto para los medicamentos contra la hepatitis C. Los nuevos fármacos contra esta patología, como Sovaldi (de Gilead) tienen una alta tasa de curación pero son de precio elevado.
Pero el trago difícil para la industria está en la aceptación de “la adopción de medidas compensatorias o correctoras para no superar el límite”, se destaca. “El establecimiento de un umbral de crecimiento a un sector altamente innovador como es el farmacéutico es una prueba más del compromiso de esta industria con la sostenibilidad de las cuentas públicas y con el Sistema Nacional de Salud”.
A la espera de mecanismos
Aún así, se desconoce cuáles serían las medidas correctoras o compensatorias que el Gobierno puede introducir y que la industria está dispuesta a aceptar. Las opciones se sitúan en introducir más rápidamente los genéricos, reducir precios para algunos fármacos, o introducir techo de gasto para otros medicamentos.
A cambio, las empresas ganarían el compromiso de reducir el tiempo de espera para introducir los nuevos fármacos, innovadores y más costosos,
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