De Guindos dice que “es posibile” que presida el Eurogrupo
El ministro de Economía, Luis De Guindos, ha admitido este lunes que “hay posibilidades” de que presida el Eurogrupo, aunque ha remarcado que ese nombramiento sería un “reconocimiento a la política económica de España y del presidente del Gobierno” y no a su labor como ministro. De Guindos ha hecho esta afirmación en el coloquio posterior a la conferencia que ha pronunciado en el Círculo Ecuestre, en Barcelona.
“Yo no voy a hacer especulaciones”, ha dicho inicialmente De Guindos al ser preguntado por si tenía cerrado ese nombramiento, tal y como publicó hoy la prensa, de que De Guindos podría ser presidente del Eurogrupo en junio.
A la pregunta de si podrá combinar esa hipotética responsabilidad, la de presidente del Eurogrupo, con la de ministro de Economía del Ejecutivo español, ha añadido: “Haré lo que crea conveniente el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy”. En referencia a la presidencia del Eurogrupo, ha comentado que ese reconocimiento lo sería “al cambio y al giro que se ha produciendo en la economía española”, que crece “al doble” que la media de la zona euro.
Confía en la madurez de los españoles
De Guindos también ha dicho este lunes que confía en la madurez de la sociedad española para evitar inestabilidad política y, en consecuencia, económica por las múltiples citas electorales de este año.
En su conferencia, bajo el lema de La recuperación de la economía española, en el Círculo Ecuestre de Barcelona, ha reconocido que “el principal elemento de incertidumbre” por los comicios es que pueda haber cambios en las políticas económicas que deshagan rápidamente las reformas de los últimos años.
Con todo, ha sostenido que España tiene ahora sentadas las bases para crecer los próximos años, tras la corrección de sus desequilibrios macroeconómicos: “Creo que la sociedad española es madura, y ese escenario de cuatro o cinco años de crecimiento importante es posible”.
Perspectiva positiva
Guindos ha repasado las previsiones del Gobierno español para este año, como un crecimiento del PIB de entre el 2,5% y el 3%, la creación de empleo por encima de 500.000 empleos, el superávit de la balanza de pagos y una inflación negativa en términos medios pero que acabará el año “ligeramente positiva”.
También ha celebrado que el sistema financiero ya está en condiciones de volver a dar crédito, las empresas siguen ganando competitividad y la prima de riesgo está contenida.