¿Cuánto se llevará Hacienda por mis inversiones en Bolsa?
Acciones: Los beneficios obtenidos por la venta de acciones tributan como ganancias y pérdidas patrimoniales en la Declaración de la Renta. Al transmitir un título, se produce una plusvalía por la que tendrá que pagarse impuestos en el IRPF y que se integrará con el resto de las ganancias y pérdidas para tributar dentro de las rentas del ahorro. Con las acciones sólo pagan impuestos en el momento de su venta.
En el momento de la venta, es cuando el contribuyente tendrá que determinar si hay o no ganancia patrimonial. Y para ello se tomará la diferencia entre el precio de venta (minorado en los gastos inherentes a dicha venta) y el precio de compra (más los gastos asociados a la compra).
En la fiscalidad de las acciones debemos aplicar la norma FIFO (First In, First Out) según la cual los primeros títulos que se transmiten son igualmente los primeros que se compraron. Este procedimiento se aplica cuando no se venden todas acciones que se poseen de una compañía, sino apenas unas pocas, y sirve para determinar el coste de adquisición de las acciones que se venden.
Dividendos en efectivo: Al ser un reparto de parte del beneficio que da la empresa a los accionistas, tributan como rendimientos del capital mobiliario en la base imponible del ahorro de la Declaración de la Renta.
En la Declaración de la Renta de 2014, los dividendos tributarán según la siguiente escala. Los primeros -6.000 euros- de dividendos tributan al 21% en la Declaración de la Renta; el tramo comprendido entre 6.001 euros y 24.000 euros, tributan al 25%; y por la parte que excedan de 24.000 tributarán al 27%. Se deberá imputar el importe recibido por dividendos en la casilla 024 “Dividendos y demás rendimientos por la participación en fondos propios de entidades” del Programa PADRE.
Este es el último año en el que los primeros 1.500 euros del cobro de dividendos está exentos de tributar. De esta forma, si se han percibido 1.700 euros de dividendos, sólo tendrá que pagar impuestos en la declaración de la renta por los últimos 200 euros.
Dividendos en acciones: En los tan de moda scrip dividend, los contribuyentes que prefieren quedarse con las acciones y renunciar a cobrar el dividendo en efectivo, posponen hasta el momento de la venta de las acciones, cuando se pagará por la diferencia entre el precio de compra (que sería el mismo que el de las acciones que dieron derecho al cobro del dividendo) y la venta.