Más poder para el INE y menos dependencia de los políticos
Después de cinco años desde la primera ronda de Peer Review, que tuvo lugar en el periodo 2006-2008, en noviembre del año pasado tuvo lugar la segunda edición de esta clase de exámenes o evaluaciones por iguales o por pares, (en su traducción del inglés) que realiza Eurostat a todos los institutos de estadística europeos. Tal y como explicó en su momento el INE, se trata de discusiones entre iguales que se realizan a partir de un cuestionario de autoevaluación acerca de cómo se elaboran las estadísticas en cada país partiendo de una descripción en detalle de cómo se obtienen los datos y después de qué manera se difunden.
“El objetivo de este ejercicio es ayudar al país sometido a revisión a mejorar su formulación, en este caso estadística, a adoptar mejores prácticas y a cumplir con los principios y normas establecidos”.
Dentro de la implantación del Código de buenas prácticas de las estadísticas europeas, la finalidad de estas revisiones es mejorar la transparencia en este proceso y la responsabilidad de los agentes implicados en el mismo, identificar las dificultades y los retrasos en relación con el cumplimiento de dicho código e incentivar la transferencia de conocimientos y experiencias mediante la identificación de las buenas prácticas.
Acciones a mejorar
La evaluación realizada al INE español, a la que ha tenido acceso CincoDías, ha logrado unas calificaciones muy positivas. Eurostat ha apreciado las dificultades que entraña el hecho de ser un país con una estructura administrativa muy descentralizada donde existen múltiples productores oficiales de estadísticas y recuerda cómo la coordinación y la armonización de esos distintos estudios se convierte en el principal reto a conseguir, “según pusieron de manifiesto todos los agentes entrevistados”, subraya el informe remitido por Eurostat.
Así, cada equipo Peer Review elabora un informe para el país evaluado centrado en los principios examinados, que puede incluir también una lista de acciones de mejora relativas a los diferentes principios del código. Entre esas recomendaciones destacan dos, que suelen repetirse en cada edición de estas evaluaciones y además son comunes a todos los Estados examinados. La primera consiste en dotar de más poder al INE, como el gran ente productor de estadísticas que debería ostentar un papel más protagonista como gran coordinador del resto de estadísticas.
Es más, una de las recomendaciones que realiza el Peer Review establece que sería positivo que el INE tuviera un mayor acceso a los microdatos de los registros estadísticos relacionados con los impuestos “a los efectos de la compilación de todas las estadísticas oficiales establecidas en el Plan Nacional de Estadística”. También, aconseja aumentar los recursos humanos con que cuenta el organismo español.
Entre los elogios que dedica a su labor, destaca el elevado grado de profesionalización con que cuenta su plantilla, el énfasis que ponen directivos y trabajadores por obtener información de máxima calidad y cómo utiliza la metodología más moderna. Los encuestados para la realización de esta evaluación (trabajadores de la institución, otros productores de estadísticas y toda clase de usuarios de la información que produce), valoraron muy positivamente el trabajo que realiza el INE, dado el fácil acceso que ofrece a todo tipo de datos y las explicaciones que suele acompañar a los mismos. Además, elogiaron que brinde cualquier información adicional que se le solicite.
Por último, y sobre la forma en la que se produce el nombramiento y cese del presidente del INE, a instancias del Gobierno de turno, los encuestados no dudan de su profesionalidad e independencia, pero sugieren que este método podría implicar ciertos riesgos que Eurostat solicita limar o evitar para garantizar su desvinculación política.
Algunos consejos al resto de instituciones
El informe elaborado por Eurostat incluye también una breve referencia para todos los ministerios que ofrecen información estadística.
Les recomienda asumir la responsabilidad exclusiva en la publicación de sus comunicados de prensa relativos a la producción de sus datos. Además, les pide fijar un calendario claro y acorde al Código de buenas prácticas estadísticas europeas y establecer sistemas precisos en caso de errores y revisiones de los datos ya publicados.
Asimismo, el INE español debería desarrollar e implementar, según el Peer Review, un plan para involucrar a expertos externos en la revisión regular de la producción estadística clave. Por último, sería bueno que incrementara su acceso remoto a microdatos con fines de investigación, así como que pudiera establecer protocolos específicos para dicho acceso.