Enganchados a la tecnología... también en el trabajo
Internet y los dispositivos móviles forman parte de nuestra vida, y como no puede ser de otra manera, también del trabajo
Casi sin darnos cuenta, de una manera progresiva y al mismo tiempo natural, la tecnología ha invadido todos los ámbitos de nuestra vida cotidiana. Ya no solo en lo relacionado con el entretenimiento sino que, casi desde el momento de levantarnos, un simple gesto como comprobar las notificaciones del teléfono está ya normalizado.
Sirvan como muestra los datos del último informe de Deloitte sobre el consumo móvil en España: 20 millones de propietarios de smartphone en nuestro país consultan el teléfono más de 50 veces al día, casi cinco millones nada más levantarse y buena parte también justo antes de apagar la luz al acostarse.
Esta invasión silenciosa de la tecnología también ha tenido su incidencia en las empresas y en sus empleados. Las primeras han adaptado sus operativas y sus servicios a un mundo conectado, que ha convertido el mercado en una competición global. Los segundos han tenido que aprender a manejar un nuevo tipo de equipamientos, de mayor carácter tecnológico, y a la vez aprender a que su productividad no mengüe por las distracciones que pueden suponer las nuevas formas de comunicación, principalmente a través del teléfono.
Una empresa más conectada
El ordenador es, sin duda, el protagonista de casi todas las actividades que tienen que ver con la tecnología dentro de la empres. Según el Informe ePyme 2013, realizado por Fundetec, la penetración media entre pymes y grandes empresas ya es del 98,9%.
En aquellas que enmarcan su actividad en los sectores de hostelería y agencias de viajes; informática, telecomunicaciones y servicios audiovisuales; y actividades profesionales, científicas y técnicas, la penetración es del 100%. En el caso de las microempresas, que no superan los dos empleados, la penetración es del 71,7%, un 0,4% más que el año anterior.
Las nuevas tecnologías son una distracción que puede menguar la productividad de los empleados
El segundo equipamiento tecnológico básico es el teléfono móvil, con una penetración del 94,7% en pymes y grandes empresas y del 74,6% en micropymes, siendo el sector del transporte y almacenamiento el que mayores porcentajes de uso tiene entre ambos tamaños de empresas.
Internet, tanto en ordenadores como en telefonía móvil se ha convertido en básico, y ya está presente en el 98% de pymes y empresas de gran tamaño, con un 100% en la actividades relacionadas con el turismo.
Y precisamente es la banda ancha móvil la red de internet que mayor progreso está teniendo. Su penetración creció en 8,2 puntos porcentuales entre 2012 y 2013 entre pymes y grandes empresas, llegando a un uso del 73,6%.
Aún mayor es el avance en las micropymes, de casi 14 puntos en un año y siendo utiliza por el 56, 8%, Los smartphones cada vez más avanzados, que permiten centralizar casi todas las operativas en un solo dispositivo, se están convirtiendo en una opción barata y sencilla para los negocios de menor tamaño.
El ‘smartphone’, aliado y... ¿verdugo?
La penetración de las aplicaciones gratuitas de mensajería instantánea ha hecho que todos estemos alerta a nuestro teléfono móvil. Según una encuesta de Phone House, el 42% de los usuarios de nuestro país no puede estar una hora sin consultar los mensajes, y el 32% atiende su terminal para contestarlos cada 15 minutos durante la jornada laboral.
Es una amenaza para la productividad, pero los dispositivos móviles también abren una oportunidad de futuro. Según la Unión Europea, cinco millones de personas trabajaran en el desarrollo de aplicaciones. Cara y cruz de una realidad enganchada a la palma de la mano.