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¿Préstamo financiero o inversión de capital?

Foto de Kent Westlund
Foto de Kent Westlund

Los préstamos financieros y las inversiones de capital son los dos métodos de financiación más comunes para emprender un negocio, suponiendo que no se cuente con capital propio. Cada una de estas estrategia tiene sus ventajas. La elección correcta dependerá de los objetivos financieros a corto y largo plazo y de las preferencias personales.

La financiación a través del endeudamiento es la mejor opción cuando prefieres mantener el control de todo el funcionamiento empresarial, y te es indiferente la compensación que te podría suponer el correr un mayor riesgo para obtener un mayor potencial de ingresos. Sin embargo, si lo que prefieres es compartir el riesgo, reducir las obligaciones del endeudamiento e incorporar expertos de categoría, entonces lo mejor es invitar a inversores de capital.

En última instancia, la decisión va a depender de ti, en función de tu propia situación. Como emprendedora con experiencia, autora y CEO de Sqeeqee.com, web pionera en redes sociales, considero que los siguientes aspectos se deberían tener en cuenta en esa decisión:

Requisitos presupuestarios

Cuando decides endeudarte, tienes que devolver el dinero. Con la financiación mediante el endeudamiento, se restringe la capacidad de futuros movimientos en efectivo al tener que vincular una parte de los beneficios actuales a los pagos mensuales. La cantidad destinada a esa deuda minimiza la reinversión en el crecimiento y en la distribución de ganancias entre los propietarios.

Con la inversión de capital, no se tiene que devolver el dinero. En cambio, los inversores reciben una parte de las asignación de beneficios futuros y las ganancias potenciales de sus acciones si la empresa tiene éxito.

Distribución de los riesgos financieros

Cuando se asume una deuda, se asume la responsabilidad financiera de los consiguientes pagos. Si incumples el préstamo siendo propietario único, estarás sacrificando tus bienes patrimoniales y recibirás un duro golpe en tu solvencia crediticia. Si estás montado como sociedad de responsabilidad limitada, el negocio sufrirá el daño a tu reputación, pero tus expectativas gananciales se verán restringidas.

La principal razón para escoger la inversión de capital como fuente de financiación es que se comparte el riesgo financiero de la operación del negocio. Los inversores ponen su dinero asumiendo que cabe la posibilidad de que nunca obtengan beneficios.

Potencial de ganancias

Si para ti no supone ningún problema el riesgo personal que conlleva un préstamo, obtendrás mayores beneficios financieros cuando el negocio empiece a dar dinero. Aparte de pagar la deuda, no tendrás que compartir las ganancias con los demás. Serás tú quien se quede con el beneficio.

Si optas por compartir riesgos, también tendrás que compartir la riqueza. Cuánto mayor inversión de capital obtengas para desarrollar el negocio, más se rebajará tu potencial de ingresos personales.

Control Operacional

Un prestamista no se involucra en la operación de tu negocio. Tras revisar tu situación financiera y emitir el préstamo, lo único que le va a preocupar es que se le ingresen los pagos puntualmente.

Las personas que invierten dinero en la empresa no suelen adoptar este enfoque de no intervención. Los grandes inversores de capital desean una participación, más o menos formal, en el negocio. Puede que te veas obligado a aceptar un miembro de la junta de la entidad de inversión a cambio del dinero. Si lo que prefieres es una autonomía absoluta en las decisiones empresariales, la inversión de capital no es la decisión correcta.

Experiencia

Un prestamista te deja en paz, pero, por otro lado, no obtendrás ninguna experiencia profesional con este tipo de financiación. Tu relación va a ser cien por cien financiera.

Si aceptas una cierta pérdida de control en favor de los inversores de capital, puede que obtengas una gran cantidad de conocimientos. Algunos emprendedores toman su decisión de acudir a inversores de capital basándose de igual manera en su experiencia, conocimientos y credibilidad en el sector, como en las cuestiones monetarias. Un valioso experto que disponga de dinero para poner en juego, puede llegar a ser un gran activo para el crecimiento de la empresa.

Este artículo es una traducción original del texto publicado por Jenny Q. Ta en Youngupstarts

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