¿Es cierto que septiembre es el mes “barato” para las vacaciones?

Para muchos el periodo de vacaciones ha terminado o incluso queda ya lejos. Los meses predilectos por la mayoría para el periodo vacacional son julio y agosto. De hecho son los meses en los que se concentra el turismo tanto nacional como internacional, siendo éste último mayor, ya que durante solamente el mes de julio y según la estadística Frontur de Tuourspain, España recibió 8,3 millones de turistas internacionales (un 5,9% más que en julio de 2013).

En cambio, para otro porcentaje de personas septiembre es el mes en el que poder disfrutar de unos días de descanso. Es el momento ideal para quienes buscan diferenciarse del resto, y para quienes no le gustan las aglomeraciones. Los gustos en cuanto a las vacaciones han cambiado no solo en cuanto a los destinos, sino también en cuanto al momento. La diferencia ahora entre la temporada alta (julio y agosto) y septiembre en cuanto a precios es ligeramente menor, por lo que septiembre se puede interpretar como el final de la temporada alta. ¿Es entonces septiembre el mes para disfrutar de unas vacaciones más baratas?

Todo depende del destino y de la actividad. Históricamente sí ha sido un mes en el que las vacaciones resultaban mejores de precio. Pero teniendo en cuenta dos datos relevantes registrados en 2013 como que los residentes en España realizaron 14,3 millones de viajes y uno de cada cuatro fueron por vacaciones (según el informe Familitur de Tourspain) y que España recibió en septiembre 6,5 millones de turistas internacionales (un 4,7% más que en 2012), según el informe Frontur de Tourspain; es posible creer que ese ahorro que se producía en septiembre, ahora no es tal debido a la creciente demanda turística.

Aunque el precio haya dejado de ser uno de los principales motivos para elegir septiembre para las vacaciones, existen otras ventajas que pueden hacer de este mes el preferido para los merecidos días de descanso.

• Reconforta irse cuando los demás vuelven. Después de haber pasado los meses más calurosos trabajando, es reconfortante saber que cuando la mayoría de la gente ya ha disfrutado de sus vacaciones, para ti aún queda lo mejor del año.
• Menos gente. Para quien no le gusta el turismo masificado, septiembre se convierte en un mes ideal. Además otra ventaja con la que contar es que no habrá prácticamente ningún establecimiento cerrado ya que la gran mayoría ya habrá vuelto de sus vacaciones.
• El tiempo es más suave. En septiembre se puede huir del calor extremo. Las temperaturas que se registran son menores, entre dos y tres grados más bajas.

Sea cual sea el momento y el destino elegido, es beneficioso contar con unos días de descanso, relax y disfrute, de cara a mejorar la salud mental, revitalizar cuerpo y mente y recargar energía para volver a la rutina laboral.