Empleo intensificará el control en los cursos formativos a trabajadores
Habrá unos sistemas de información mucho más potentes, lo que conducirá a que los controles sobre los cursos serán mayores”, ha indicado Hidalgo tras su intervención en el curso Políticas de Seguridad Social y Empleo como motor de crecimiento económico de la Universidad Internacional Menéndez Pelayo (UIMP).
Los actuales acuerdos de formación han perdido su vigencia, por lo que el Ejecutivo lleva ya varios meses negociando con patronal y sindicatos la firma de unos nuevos acuerdos. Si bien, en esta ocasión, debido sobre todo a los constantes escándalos relacionados con los fraudes en el uso de fondos públicos para la formación (como los casos de UGT en Andalucía o la patronal CEIM, en Madrid) los firmantes he han propuesto cambiar el modelo formativo.
En este punto fuentes conocedoras de la negociación aseguran que las conversaciones están algo paradas desde hace un mes, aunque el propio presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha asegurado que el nuevo sistema deberá estar en marcha antes de final de año, según ha recordado Hidalgo.
En esta negociación, la patronal CEOE --tal y como ha indicado su presidente, Juan Rosell, en varias ocasiones-- reclamará que las empresas reciban más dinero que el que perciben en la actualidad de la recaudación de la cuota de formación que pagan las empresas y, en menor medida los trabajadores. Mientras que la participación de los agentes sociales en el diseño de los planes formativos, tal y como exigen, patronal y sindicatos, también está en discusión con el Gobierno.
La industria del automóvil, muy insatisfecha
Precisamente, el vicepresidente ejecutivo de la patronal del automóvil (Anfac), Mario Armero, ha manifestado hoy durante su intervención en este curso de la UIMP, que la industria automovilística “está muy insatisfecha con el actual sistema formativo”.
Según ha criticado, “no recibimos ni bonificaciones, ni retornos y los planes, ya sean de la Fundación Tripartita o de otros ámbitos, no se adaptan a las necesidades de las empresas”. En este punto, ha urgido a que el sistema que se está negociando solucione estos problemas.
Armero –que ha anunciado la llegada de 1.500 millones de inversión a la industria del automóvil en los próximos doce meses-- también ha reclamado a los responsables del Ministerio de Empleo la creación de un contrato temporal “de mayor duración y vinculado al tiempo de fabricación de un vehículo”. Si bien ha lamentado que esta petición ya le ha sido rechazada tanto por Empleo como por los sindicatos.
Dicho esto, se sumó al numeroso colectivo que en los últimos tiempos pide una rebaja de las cotizaciones sociales –también rechazada por Empleo—. Según explicó Armero, dicha rebaja “haría a las empresas más competitivas permitiéndoles compensar otros costes, que no van bien, como son los de la energía”.