La CE aprueba la compra de E-Plus por Telefónica, que pasa a liderar el mercado móvil alemán
Deberá ceder el 30% de la capacidad de red de la nueva empresa La teleco alcanzará unas sinergias superiores a 5.000 millones de euros Prevé cerrar la operación durante el tercer trimestre
La Comisión Europea (CE) ha informado hoy de que ha autorizado con condiciones la adquisición por parte de Telefónica de E-Plus, la filial alemana de telefonía móvil de la holandesa KPN, a cambio de una serie de desinversiones ofrecidas por la operadora española. En la mayor transacción realizada por Telefónica desde la compra de la participación de Portugal Telecom en la brasileña Vivo en el año 2010. En su conjunto, la compra de E-Plus está valorada en cerca de 8.600 millones de euros.
En este caso, Bruselas ha indicado que el visto bueno para la operación está supeditado en particular a que Telefónica ceda el 30% de la capacidad de red de la empresa resultante de la fusión a uno o varios operadores virtuales para garantizar la competencia en el mercado alemán de telefonía móvil.
Con este objetivo, la empresa española cerró la pasada semana un acuerdo con el operador virtual Drillisch Group, por el cual este último se comprometió a comprar el 20% de la capacidad de las redes móviles que sean propiedad de Telefónica tras el proceso de fusión con E-Plus, además de mantener la capacidad que ya tenía comprometida con la propia Telefónica para dar servicios a sus actuales clientes.
“Las concesiones con las que se ha comprometido Telefónica garantizan que la adquisición de E-Plus no perjudica la competencia en los mercados de telecomunicaciones de Alemania”, señaló en un comunicado el vicepresidente de la CE y comisario de Competencia, Joaquín Almunia. La compra tuvo una gran relevancia desde el punto de vista de la competencia puesto que supondrá la reducción del número de operadores de telefonía móvil de red desde cuatro a tres.
La operación tiene una gran trascendencia para Telefónica. Y es que la compra de E-Plus le convertirá en el primer operador alemán de móviles por número de clientes, por delante de Deutsche Telekom y Vodafone, con cerca de 44 millones de usuarios y una cuota de mercado del 39%.
Además, Alemania pasará a aportar entre el 14% y el 15% de los ingresos de Telefónica, frente al 9% de la actualidad.
La operadora española, que espera cerrar la operación durante el tercer trimestre, obtendrá unas sinergias superiores a 5.000 millones de euros, procedentes de ámbitos como la distribución, la atención al cliente y los servicios de red. “Estas sinergias permitirán ahorros netos a partir del segundo año”, reiteró la compañía.
Telefónica reiteró que la operación acelerará el despliegue de las redes LTE en el país. “La nueva compañía resultante de la fusión podrá llevar a cabo un mayor, mejor y más rápido despliegue de LTE que el cualquiera de ambas compañías podría acometer por separado”, explica la operadora, que insiste en que “los más beneficiados por esta transacción serán los clientes, ya que la nueva compañía ganará una escala y eficiencias considerables que le permitirán seguir siendo un estimulante en el mercado, proveer productos y servicios innovadores”.
En términos generales, la decisión de Bruselas puede acelerar el proceso de consolidación del sector en Europa. Y es que la transacción implicará la posibilidad de que se reduzca de cuatro a tres el número de operadores móviles en cada país. Según fuentes del sector, la aprobación podría reabrir un escenario de venta de Yoigo, cuarto operador español de móviles, por parte de TeliaSonera.
A lo largo de los últimos dos años, las telecos han insistido en la necesidad de que se acelere la consolidación, para que se establezcan en los mercados unas condiciones más favorables para la inversión. El sector ha criticado en numerosas ocasiones la estructura del mercado establecido por la regulación, que ha provocado una continuada caída de ingresos por parte de las telecos.
Las operadoras han insistido en que Europa es un mercado excesivamente fragmentado, frente a EE UU, Japón o China, además de contar con 27 marcos regulatorios frente a los grandes mercados. En este sentido, han recordado que es necesario avanzar en la armonización de la regulación europea y en el proceso de consolidación en el que nos encontramos inmersos.