La reforma fiscal reduce la tributación del ahorro
El IRPF grava las rentas salariales y también los rendimientos del ahorro y las plusvalías. Actualmente, los beneficios derivados de, por ejemplo, un depósito bancario o la venta de acciones tributan al 21% por los primeros 6.000 euros. Entre 6.000 euros y 24.000 euros se aplica un gravamen del 25% y del 27% a partir de ese umbral. Hacienda reducirá la fiscalidad sobre los rendimientos del ahorro.
Con la reforma fiscal que ha anunciado hoy el Ejecutivo, en 2015 bajará el tipo hasta 6.000 euros al 20% (y hasta el 19% en 2016). Para rendimientos entre 6.000 y 24.000 euros caerá al 22% y luego al 21%. Por último, el tipo máximo para rentas del capital caerá al 24% y en 2016 al 23%.
El ministro de Economía, Luis de Guindos, ya había avanzado esta mañana que la reforma fiscal "va a beneficiar el ahorro".