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El Ibex alcanza los 11.165 puntos víctima del pánico comprador. El Dax germano conquista a cierre los 10.000 puntos. Espeluznante resistencia creciente superada por el Dow Jones. Roza los 17.000 puntos.
Espectacular cierre semanal en la renta variable en su conjunto. El ejército alcista terminó con broche de oro la intensa semana tras el esperado Día D. Se confirmó definitivamente la rotura de resistencias en todas las Bolsas a excepción de la británica y el comienzo de una nueva ofensiva de los toros tras salir del extenso lateral. En la última sesión del viernes volvieron a brillar y de qué forma los selectivos periféricos en Europa, con el Campeador a la cabeza. Nuestro selectivo cayó presa finalmente del pánico comprador. También importante fue ver como el Gentleman inglés lograba escapar de la zona de riesgo en los 6.800 puntos, aunque la contundencia de los cuerpos especiales británicos no fue tan firme y continuó bajo los 6.900 puntos.
Al otro lado de Atlántico, los cinco días finalizaron de la misma forma, rotunda victoria alcista. La tecnología se aproximó a sus máximos anuales y los dos grandes marcaron imparables nuevos récords históricos. La derrota del ejército bajista es un hecho en los gráficos a falta de pequeños flecos. Esto no quiere decir que no toque ahora consolidar la enérgica victoria alcista y aliviar la fuerte sobrecompra acumulada. Tampoco hay descartar que el Mercado quiera testear el inicio del nuevo gran impulso para comprobar su solidez. Pero lo que ya no se puede dudar es quién tiene el mando de las operaciones en todos los plazos en la renta variable, los toros. Y esto será así mientras los bajistas no reconquisten las resistencias perdidas. El principio de polaridad habrá de convertirlas en soportes en el futuro si la ofensiva alcista es confiable.
El Ibex se enfrenta a los 11.165 puntos
El Campeador español conquistó con severa contundencia los 11.000 puntos el viernes pasado, para acampar sus tropas sobre los 11.064 puntos. Ascenso diario del +1,73% y del +2,46% semanal. Figura diaria completamente sólida y espigada con mínimas sombras en sus extremos. Robusta vela semanal al alza con cierre en máximos y sombra inferior. Ambas pautas, diaria y semanal, son una cornada espeluznante en la piel del gran oso. Tras superar la resistencia de los 10.552 puntos al tercer intento, el asalto a la siguiente trinchera bajista ha sido centelleante. Y con aumento de volumen de negociación considerable. Quedan por tanto los 10.552 y los 10.665 puntos como soportes claves para el corto plazo. El triángulo ascendente ha roto al alza y le da una proyección para alcanzar los 11.500 puntos en próximas semanas/meses. La pérdida de los 10.280/50 puntos confirmaría un fallo alcista de la figura triangular. Algo que a día de hoy es altamente improbable.
Como citábamos en el último análisis, los 11.000/165 puntos son una dura resistencia. Detuvieron al Ibex en dos ocasiones en los años 2010 y 2011. Desde ahí comentamos que se pudiera producir una consolidación, para dar merecido descanso a las tropas alcistas tras su brillante arranque. Se aliviaría así la alta sobrecompra acumulada antes del nuevo asalto en busca de los 11.500/566 puntos. Ayer el Campeador arrancaba la sesión con furia y llegó a superar los 11.165 puntos ligeramente. Trazó máximos anuales en los 11.188 puntos.
Pero rápidamente los alcistas se quedaron sin fuelle. La resistencia cumplió su función y los toros se replegaron hasta los niveles de apertura. De subir algo más de un +1% a primera hora, el Ibex se quedó plano a media mañana, descendiendo hasta los 11.057 puntos. Los alcistas ya no intentaron más escaramuzas viendo el cansancio de sus tropas. Esperaron a Wall Street abajo. Fue entonces cuando los toros volvieron a dar otra magistral demostración de fortaleza. Volvieron a la carga con firmeza sin mirar atrás. A cierre el Ibex se situó en los 11.164 puntos. Sobre la misma resistencia. Trazó una sólida vela verde con ligeras sombras en ambos extremos.
Ahora habrá que ver si el Campeador necesita consolidar tras alcanzar los 11.165 puntos. En principio y tras ver la fulgurante ofensiva de los toros de última hora, no parece que sea así. La figura dibujada no muestra síntoma de agotamiento. En caso de producirse el movimiento de consolidación podría alcanzar los 10.927 o los 10.865 puntos. Corresponden al 50% y al 61,8% de retroceso Fibonacci del último impulso, desde los 10.665 hasta los 11.188 puntos. Antes habría que perder el 38,20% de retroceso en los 10.988 puntos.
Total recuperación de las legiones italianas
El César no ha defraudado tras los complicados momentos por los que pasó el pasado mes de mayo. La respuesta de los centuriones ha sido ejemplar. Lo venían avisando desde que abrieron el gran hueco al alza y superaron la envolvente bajista sobre los 21.361 puntos. La directriz acelerada había sido salvada. El viernes pasado marcó nuevos máximos anuales sobre los 22.290 puntos. Ascenso del +1,54% con una sólida y extensa vela alcista con sombra inferior. En la semana se apuntó un +3,05% con una figura similar. En la jornada de ayer lunes revalidó la hazaña hasta los 22.472 puntos con una subida del +0,82%. Tercera extensa vela al alza con sombra inferior. El Mibtel apunta ya a su próxima resistencia horizontal en los 23.273/539 puntos. No habrá el menor síntoma de debilidad en las legiones mientras estén por encima de los 22.000/21.900 puntos.
Europa arrastrada por la periferia
El resto del Bolsas europeas se están viendo arrastradas por la furia de sus homólogas periféricas. No terminan de arrancar con fuerza pero siguen la inercia alcista del Ibex y del Mibtel. Los alcistas consiguen alejarse poco a poco de las resistencias conquistadas. El Káiser germano se mantiene asediando los 10.000 puntos, los blindados intentan anular el comprometido martillo invertido dejado el jueves pasado sobre los 10.013 puntos. Ayer lunes cerró la sesión en los 10.008 puntos con un limitado ascenso del +0,21%. Trazó una pequeña peonza verde. En el gráfico semanal trazó un limpio doji con cierre en la parte alta. Ascendió un +0,44% en el cómputo de la semana. Esa figura nos dirá si el Dax logra abrir la puerta hacia los 10.500 puntos, dando continuidad a la proyección del HCH invertido. Por debajo de los 9.866 puntos tocaría bajar a cubrir el hueco de ruptura de los 9.800 puntos.
Tanto el Emperador europeo como el General De Gaulle francés siguen su ascenso, sin prisa pero sin pausa. Sus tropas no hacen grandes esfuerzos, pero se van adentrando en zona enemiga. Escoltan el camino abierto por las tropas mediterráneas. Mientras este escenario persista será difícil ver descensos. Ayer el Eurostoxx terminó en los 3.305 puntos con un alza del +0,33%. Pequeña peonza verde, tras la sólida figura alza del vienes pasado con un +0,83% de revalorización. En el gráfico semanal, robusta vela alcista con sombra inferior. Se apuntó un +1,53% en la pasada semana. Todo indica que los toros han iniciado la ofensiva hacia los 3.500 puntos, después de conquistar las durísimas resistencias del medio/largo plazo. Ya no habrá marcha atrás mientras los 3.200/17 puntos estén bajo control alcista.
Similar situación en el Cac tras cubrir el hueco alcista y arrancar desde los 4.500 puntos. La legión extranjera avanza terreno desde la retaguardia, pero sin sacar a las tropas de élite al combate. Si no hay enemigos por delante... ¿Por qué no avanzar? Eso sí, con cautela. El selectivo galo tiene sobre los 4.700/50 puntos dos huesos muy duros. La parte superior de los canales del largo y medio plazo. Zona por tanto muy complicada y de fuerte resistencias. Quizás sea este el motivo por el que el General De Gaulle muestra cierta reticencia a derrochar fuerzas. Ayer ascendió un escaso +0,17% hasta los 4.589 puntos. Pequeño martillo tras la sólida vela verde del viernes que sumó un +0,71%. Pauta de posible descanso alcista tras el giro dado. En el cómputo semanal ascendió un +1,36% dibujando una extensa figura alcista con amplia sombra inferior. Habrá que ver si hay consolidación hasta los 4.500 puntos en el Cac. Por debajo de los 4.539/36 puntos se confirmaría tras perder los 4.570 puntos.
El maldito secreto sigue sin desvelarse
Es el Gentleman inglés el índice que falta por conquistar resistencias. En su caso históricas como son los 6.950 puntos. Alcanzar la subida libre absoluta está siendo un auténtico quebradero de cabeza para los cuerpos especiales británicos. Y por añadidura al resto de la renta variable. Un oculto secreto que el Footsie se niega a desvelar desde junio de 2013. La parte positiva de las últimas dos jornadas estuvo en la parada en seco de los bajistas, tras el doji trazado el pasado jueves sobre el soporte de los 6.800 puntos. Dibuja un posible doble suelo en ese nivel que se confirmaría por encima de los 6.900 puntos. Esta doble pauta le daría una proyección de 200 puntos. Los cuerpos especiales tienen una nueva oportunidad de alcanzar los ansiados máximos históricos. Ayer ascendió un +0,27% hasta situarse sobre los 6.876 puntos. Dibujó una pequeña y sólida vela verde, tras la envolvente alcista previa que superó el mencionado doji. En el gráfico semanal trazó un martillo que será clave, debería desvelarnos de una vez por todas si el selectivo inglés logra la victoria. Cuidado con perder los 9.800 puntos.
Wall Street, sumando récords
Al otro lado del Atlántico los toros siguen en plena vorágine. Cae máximo tras máximo histórico. Si bien en la sesión de ayer lunes, ya mostraron cierto agotamiento tras la categórica ruptura de resistencias. Se trazaron pequeñas peonzas verdes con sombra superior todos sus grandes selectivos. Con todo y vista la dureza del ataque alcista, habrá que esperar al menos un cierre diario con nuevos mínimos, para tener una mínima certeza. El General Custer terminó ayer en los 1.951 puntos, quedando prácticamente plano. Nuevos máximos históricos sobre los 1.955 puntos. En el gráfico semanal trazó una sólida vela alcista con mínima sombra inferior. Sumó un +1,34% en la semana. Mientras el S&P 500 no se baje de los 1.900 puntos, la espiral alcista puede llevarle a los 2.000 puntos sin problemas. Por debajo de los 1.940 puntos podría comenzar el merecido descanso de los alcistas. Una ligera consolidación y poco más.
El Sargento de Hierro acarició ayer los 17.000 puntos. Cerró la sesión en los 16.943 puntos, ascendiendo un ligero +0,11% y alcanzando nueva cota histórica en los 16.970 puntos. El gráfico semanal dejó una sólida vela alcista con cierre en máximos sobre los 16.924 puntos. Sumó un +1,24% en el cómputo semanal. Las resistencias crecientes del muy largo plazo que empieza a conquistar el Dow Jones son pavorosas. Se las muestro en el gráfico de hoy en velas mensuales. El cielo azul se abre mientras un abismo queda bajo sus pies. En el estricto corto plazo, sólo por debajo de los 16.700/670 puntos podríamos ver algo más que una ligera consolidación.
Por su parte, el Nasdaq Composite prosigue con la fulgurante proyección del triángulo simétrico roto al alza. En la jornada de ayer, el bastión alcista se acercaba ya a sus máximos anuales. Alcanzó los 4.346 puntos intradía, para cerrar diez puntos más abajo con un ascenso del +0,34%. Mientras la tecnología no ceda los 4.296 puntos, el asalto a máximos anuales podrá producirse en cualquier momento. Los 4.371 puntos empiezan a temblar. Por encima, el Nasdaq Composite puede proyectarse otros 400 puntos las próximas semanas/meses. Extensa y sólida vela semanal con sombra inferior dibujada a cierre del viernes. Sumó un +1,86% durante las cinco sesiones.