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Alto riesgo de pánico comprador en Bolsa

La rendición del ejército bajista parece inminente, un golpe más y... Se puede desatar el miedo inversor a perderse el gran impulso alcista junto a... Un masivo cierre de cortos de quienes se opusieron a la tendencia alcista.

TOTAL DERROTA BAJISTA. El Káiser germano conquistó ayer con rotunda claridad los 9.800 puntos. Termina el último movimiento en forma de Asa de la gran pauta alcista del HCH invertido. Trazó nuevos máximos históricos en los 9.892 puntos, confirmando la figura con un amplio hueco al alza y un extenso marubozu prácticamente sólido. La proyección del HCH invertido le manda a los 10.500 puntos para los próximos meses. Mientras el gap abierto y la directriz acelerada del corto plazo no se pierdan, los blindados solo marcan un camino. El de los ascensos y la derrota bajista en Europa.
TOTAL DERROTA BAJISTA. El Káiser germano conquistó ayer con rotunda claridad los 9.800 puntos. Termina el último movimiento en forma de Asa de la gran pauta alcista del HCH invertido. Trazó nuevos máximos históricos en los 9.892 puntos, confirmando la figura con un amplio hueco al alza y un extenso marubozu prácticamente sólido. La proyección del HCH invertido le manda a los 10.500 puntos para los próximos meses. Mientras el gap abierto y la directriz acelerada del corto plazo no se pierdan, los blindados solo marcan un camino. El de los ascensos y la derrota bajista en Europa.

Grave varapalo sufrido en el ejército bajista ayer en Europa. Lo cierto es que los toros ya dejaron sus serias intenciones de conquistar resistencias en las últimas horas del cierre semanal. El aviso de consolidación del jueves pasado fue efímero tras marcar nuevos mínimos en la sesión del viernes. Los blindados germanos no cedieron posiciones en el Káiser y los osos empezaron a ver como los proyectiles caían sobre sus cabezas. El enérgico arranque de las legiones italianas en el César ya les dejó en estado de shock. Los bajistas abandonaron las armas y sus adversarios esperaron sin apenas moverse a la apertura de Wall Street.

Fue entonces cuando los toros remataron poco antes de la campana. Una rápida y seca incursión llevó a todos los selectivos de nuestro continente a cerrar muy cerca de máximos anuales o resistencias. Las primeras banderas de rendición ondeaban en las trincheras bajistas. Especialmente en el Dax que culminaba el desarrollo del asa del HCH invertido. La división acorazada se quedaba frente a los 9.800 puntos. Ascenso del +0,48% hasta los 9.768 puntos. El Ibex lograba nuevamente conquistar los 10.550/30 puntos y la parte superior del triángulo ascendente por la mínima. Subida del +0,36% hasta los 10.558 puntos.

Pero lo más relevante fue ver el devastador ataque final en el Mibtel. No se confirmaba a cierre semanal la rotura bajista de la directriz acelerada del medio plazo y ascendía un contundente +1,83 hasta los 20.745 puntos. Tan sólo el Footsie inglés dejaba dudas a cierre semanal. Los cuerpos especiales británicos no se abrieron paso y se vieron obligados a permanecer muy cerca de los 6.800 puntos. Cerró plano quince puntos más arriba.

Por su parte, al otro lado de Atlántico el cierre semanal no pudo acabar mejor. El Nasdaq Composite daba inicio a la reconquista de los 4.200/180 puntos. Cerraba el viernes en los 4.185 puntos con un ascenso del +0,76%. El General Custer lograba por primera vez que sus tropas durmieran sobre los 1.900 puntos. La subida fue del +0,42%. El Sargento de Hierro abría las puertas de los 16.600 puntos, acabando seis puntos por encima con un +0,38% de revalorización. El ejército de los osos quedó muy tocado y en una situación extrema. Su nuevo fracaso tras los reversal bajistas trazados hacía apenas una semana estaban a punto de ser anulados. Y con ellos sus opciones.

La derrota bajista se consumó ayer

En la primera sesión de la semana, con las Bolsas inglesa y americanas cerradas por festivo, el ejército alcista decidió dar la puntilla a los osos sin más dilación. Tras una apertura con hueco al alza, la ofensiva ya se no se detuvo. Los osos empezaron a huir en todo el continente tras ver como los blindados germanos arrasaban literalmente la trinchera de los 9.800 puntos. Sus obuses devastaron las últimas defensas enemigas en Europa. El Dax alcanzaba la victoria retomando la subida libre absoluta con total autoridad. Ascenso del +1,28% hasta los 9,892 puntos. Confirma con el final del asa, la rotura de la figura de HCH invertido. Sólida vela marubozu con hueco al alza entre los 9.768 y los 9.821 puntos. Mientras ese gap no sea cerrado, los bajistas derrotados y sin opciones de ninguna clase. Como ya citamos en anteriores análisis, la pauta del HCH invertido tiene una proyección para llevar al Dax a los 10.500 puntos en los próximos meses. El gigante alemán ha dictado sentencia.

Los toros atacaron sin descanso en el Campeador tras superar los 10.550 puntos. No desaprovecharon la ocasión de verse nuevamente por encima del triángulo ascendente y a cierre acariciaban los máximos anuales sobre los 10.705 puntos. Terminaron la ofensiva sobre los 10.687 puntos con un ascenso del +1,22%. Tras el segundo martillo trazado el viernes pasado, el hueco al alza abierto ayer sobre los 10.558 y los 10.576 puntos, dio paso a una sólida y extensa vela alcista con ligeras sombras en ambos extremos. El reversal bajista ha quedado anulado. La conquista de los 10.705 puntos parece cuestión de horas o pocas sesiones. Una vez haya caído, pocas dudas quedarán de la rotura al alza de la figura triangular. El ataque a la resistencia de los 11.000/165 puntos tendría luz verde. Recordamos que la proyección de la pauta tiene una proyección capaz de alcanzar los 11.500 puntos en el Ibex para los próximos meses.

El Emperador europeo marcó nuevos máximos anuales por un sólo punto. Cerró la enérgica jornada alcista de ayer lunes en los 3.240 puntos, con una ascenso del +1,16%. Trazó un compacto y contundente marubozu alcista tras el hueco al alza de apertura entre los 3.203 y los 3.211 puntos. El reversal bajista ha sido anulado y los 3.239 puntos han caído en manos de los toros. Todo apunta a que la gran batalla por los máximos del 2011 ha tocado a su fin. El Eurostoxx ya puede soñar con los 3.500 puntos en los próximos meses. Mientras el hueco alcista no sea cerrado, la orden de ataque queda activada y el riesgo de ver verticales alzas es muy alto.

Aunque con algo menos de ímpetu, el General De Gaulle francés tampoco falló y trazó nuevos máximos anuales con solvencia. Sigue incansable y a su ritmo en la imparable campaña alcista de 2014. La dura resistencia de los 4.500 puntos fue conquistada finalmente por la legión extranjera. El Cac ascendió ayer un +0,75% hasta los 4.526 puntos. Sólida vela alcista con sombra inferior, algo menos extensa que en sus homólogas, tras casi cubrir el hueco de apertura sobre los 4.493 y los 4.496 puntos. Toda apunta al inicio de la ofensiva gala a la parte superior de los canales alcistas de medio/largo plazo sobre los 4.750 puntos.

Sencillamente espectacular la recuperación del César italiano. Las legiones han ejecutado un movimiento magistral sobre su zona clave en el gráfico, la directriz acelerada del medio plazo. Han hecho exactamente lo que les pedimos. Tras detectar el perfecto pullback para testear la figura giro el jueves, comentamos que la ofensiva de los centuriones no debía fallar más. Pues bien, durante dos últimas sesiones ha sido devastadora. El viernes salvaron los 21.558 puntos y la mencionada directriz acelerada. Y ayer ascendieron nada más y nada menos que un +3,61% hasta los 21.493 puntos. Kilométrico hueco al alza abierto ayer entre los 20.745 y los 21.129 puntos, tras el cual levantó un largo marubozu alcista, sólido de principio a fin. Los momentos más complicados de 2104 han sido superados con nota en el Mibtel. Las legiones vuelven por sus fueros.

Hoy habrá que ver como comienzan la semana en los índices en Wall Street y al importante movimiento que haga el Footsie inglés en la apertura europea. Si los cuerpos especiales inician el asalto a los 6.900 puntos y la caballería americana se incursiona por encima de los 1.900 puntos en el S&P 500, se pueden desatar verticales ascensos provocados por el pánico comprador, al ver como los máximos anuales e históricos caen en manos de los alcistas. Esto se acentuaría ante un posible cierre de cortos de quienes no creyeron en la continuación de la tendencia o abrieron coberturas para reducir riesgos en sus carteras. Ya sólo un milagro puede salvar al ejército bajista de la derrota.

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