Iberia estudia la compra de 16 aviones
El consejero delegado de IAG, Willie Walsh, ofreció días atrás dos buenos indicios sobre el futuro inmediato de Iberia: la aerolínea española volverá a presentar beneficio operativo este año y en breve se tomará una decisión sobre la ejecución de opciones de compra para modernizar su flota. Fuentes de la máxima solvencia aseguran que la cúpula de Iberia y el propio Walsh ya manejan una horquilla que va de un pedido mínimo de 16 aviones a un máximo de 32 unidades este año.
En recientes comparecencias, el presidente de Iberia, Luis Gallego, ha reconocido que la aerolínea está decidida a crecer una vez conseguidos los objetivos de ajuste de costes y en cuanto se consolide cierta recuperación de la demanda. El hecho es que en Iberia estiman que esta última está estancada aún en el mercado español, lo que hace que se actúe con la máxima cautela.
Gallego y sus más íntimos colaboradores han cambiado el Plan de Transformación, lanzado en noviembre de 2012 para el ajuste de personal y producción, por una nueva hoja de ruta que debe marcar cinco años de crecimiento. Si en 2012 las pérdidas operativas fueron de 360 millones para Iberia, los números rojos cayeron a la mitad en 2013 y en 2014 se espera un pequeño margen de beneficio operativo. Entre los retos impuestos por la dirección está el de ganar dinero en verano, algo que no se conseguía antes de los ajustes en la aerolínea.
Iberia mira tres modelos con especial atención: el Airbus A350, el Boeing 787 y el 777X, también de la factoría estadounidense. Todos ellos cubren el largo radio, se están repartiendo la atención de las aerolíneas de medio mundo y su máximo valor es el ahorro de combustible y su repercusión en los costes por asiento operado.
Qatar Airways fue el cliente de Airbus que lanzó el A350 el año pasado. Su precio en catálogo parte de los 180 millones. Su producción supone un avance sobre los Airbus A330 que Iberia está recibiendo estos meses y responde a la batalla abierta con Boeing, en respuesta a la comercialización del 787-9 Dreamliner. Al cierre de 2013, Airbus había recibido pedidos por algo más de 800 unidades.
En cuanto al Boeing, el fabricante dice que consume un 20% menos que sus rivales y su ruido es un 60% menor. El 777X fue presentado en noviembre de 2013 en Dubái, y su primera entrega está programada para 2020. Cuatro aerolíneas han firmado el pedido de 259 aparatos. Boeing habla de él como el avión bimotor “más grande y eficiente del mundo, con una eficiencia en el consumo de combustible un 12% superior y costes operativos un 10% inferiores a los de los aviones de otros fabricantes”.
IAG ya cerró en abril del año pasado un pedido en firme de 18 aviones A350-1000 para British Airways. El encargo está valorado, a precio de catálogo, en 5.977 millones de dólares (unos 4.360 millones de euros) y los aviones llegarán entre 2017 y 2023 para empezar a jubilar una treintena de 747-400. El acuerdo con Airbus también incluía 18 opciones del mismo modelo para reforzar a la aerolínea británica en el largo radio. Estas opciones se sumaban a otras 18 existentes sobre el 787 de Boeing.
Hace un año Iberia negociaba los ajustes de plantilla e IAG solo firmó para ella un acuerdo con los dos grandes fabricantes de aviones para establecer los precios y plazos de entregas que podrían derivar en pedidos de los 787 y A350.
Los nuevos aviones se convertirán en punta de lanza de Iberia y darán el relevo a los A340, cuyos interiores están siendo renovados en respuesta a la nueva oferta en el largo radio. Entre tanto, la compañía tiene aún ocho opciones sobre los bimotores Airbus 330, como los que ha incorporado a su flota para cubrir la Costa Este de EE UU.
La clave de operar en aeropuertos altos y cálidos
Una de las características que más está teniendo en cuenta la dirección de Iberia para decantarse por uno u otro modelo de avión, en la renovación de su flota de largo radio, es el rendimiento y habilidades de los A350 y Boeing 787 para operar en los aeropuertos denominados hot and high. Volar hacia o desde destinos elevados sobre el nivel del mar y con temperaturas altas, como sucede en México DF, La Paz, Quito o Bogotá, ofrece una serie de dificultades extras, derivadas de la menor densidad del aire. Al tratarse de algunos de los destinos habituales de Iberia, las nuevas incorporaciones las deberán salvar con la máxima solvencia.
Iberia cuenta con 32 opciones sobre aparatos Airbus A350-900, 8 más sobre el modelo A330 y 12 opciones que podría transformar por otros tantos Boeing 787. La aerolínea debe al combustible el 40% de sus costes, por lo que la gestión de la renovación de flota resulta crítica para abaratar costes de operación.
La oferta de la compañía española está basada en 73 aviones (sin contar los de Iberia Express ni los de la franquiciada Air Nostrum). Para atender el largo radio están los siete Airbus 330; 17 aparatos A340/600, y siete A340/300. Y para el corto radio están operando 13 Airbus 319, 11 aviones A320 y los 18 Airbus 321.
Desde Londres, el grupo IAG ya realizó el pasado verano un importantísimo pedido para Vueling, la otra aerolínea española del grupo. En concreto, anunció la adquisición de 62 aviones (30 Airbus 320ceo y 32 aparatos A320neo), que llegarán a partir del año 2015, y la firma de 58 opciones.