Iberdrola cae un 3% en Bolsa tras vender Bankia su paquete
Bankia quiere finalizar su plan de desinversiones este mismo año. Ahora le ha tocado el turno a su participación del 4,94% en Iberdrola, aprovechanso la escalada de su cotización. Una de las pocas joyas de la corona que le quedaba a la entidad.
La eléctrica que preside Ignacio Sánchez Galán, tras haber permanecida suspendida de cotización por la CNMV entre las 9 y las 10 de la mañana , ha vuelto a negociarse con caídas en el entorno del 3%.
La entidad ha encargado la operación de venta a Citi y UBS y a Beka Finance, antigua Bankia Bolsa, según un hecho relevante remitido ayer a la CNMV, en el que se explica que la desinversión será por el 4,94% de Iberdrola, el equivalente a 314,8 millones de acciones. La entidad obtendrá plusvalías por 270 millones.
Esta venta, como las que lleva realizando Bankia desde hace casi un año, tienen su origen en las exigencias de Bruselas, tras haber recibido más de 22.400 millones de euros en ayudas públicas.
La venta de Iberdrola se cerrará esta mañana. La empresa está suspendida de negociación hasta las 10 de la mañana. Los compradores del paquete accionarial son inversores institucionales, según apuntan varias fuentes.
Hasta el momento, la entidad que preside José Ignacio Goirigolzarri, ha obtenido unas plusvalías de 514 millones de euros por la venta de su cartera de participadas.
La venta se cerrará con un descuento respecto al precio de cotización, pero aun así con plusvalías para el banco, que tiene contabilizado en libros esta participación a un precio inferior.
Iberdrola bajó hoy un 0,50 % en bolsa, hasta 5,002 euros por acción, pero en lo que va de año se ha revalorizado un 7,92 % y su capitalización ronda los 31.880 millones. De este modo, la participación de Bankia está valorada en unos 1.575 millones.
En una entrevista publicada recientemente, el banquero consideraba que el momento actual era idóneo para vender la participación de Bankia en Iberdrola, puesto que los mercados financieros se habían abierto tras haber estado “muy cerrados”.
Esa afirmación disparó las especulaciones sobre una posible venta de forma inminente de este paquete accionarial que Bankia controla a través de su matriz BFA y del que está obligada a desprenderse, al igual que del resto de participaciones empresariales, tras recibir fondos públicos.
En concreto, el grupo tiene el compromiso de “acelerar la venta” de sus participaciones siempre que haya liquidez en el mercado y el precio de cotización durante treinta sesiones bursátiles sea un 15 % superior al valor al que lo tiene contabilizado en libros.