Resultados de Popular: el banco quiere volver a pagar los dividendos previos a la crisis
Popular ganó 325,3 millones de euros el año pasado, lo que supone incumplir con su plan estratégico, que contemplaba 500 millones, pero que supera las previsiones del consenso de mercado recopilado por Bloomberg, que apuntaba a unos 200 millones. La entidad ha destinado a provisiones 2.719 millones de euros en el conjunto del ejercicio.
En rueda de prensa, el presidente de la entidad, Ángel Ron, ha explicado que el objetivo de Popular es volver gradualmente a la misma política de dividendos que tenía antes de que estallara la crisis, según declaraciones recogidas por Bloomberg. En 2007, su pay out (porcentaje de los beneficios destinado a retribuir a los accionistas) se situó en el 47,4% y con cargo a ese ejercicio pagó un total de 0,4934 euros por acción totalmente en efectivo.
En 2010, el banco comenzó a utilizar la fórmula del scrip dividend (ampliación de capital con cargo a reservas en las que se compromete a comprar los derechos a un precio fijado) en uno de los pagos y abonó con cargo a las cuentas de ese ejercicio un total de 0,225 euros por acción. A cargo de los resultados de 2011, realizó tres remuneraciones, dos de ellas en scrip, por un máximo de 0,134 euros. En octubre de 2012 anunció la cancelación total del dividendo, y ha vuelto a remunerar a sus accionistas este año, utilizando el scrip, con un importe en efectivo máximo de 0,04 euros por acción. Está, precisamente, en pleno proceso de retribución.
La entidad que preside Ángel Ron vuelve a beneficios, después de registrar unas pérdidas de 2.461 millones en 2012, por las fortísimas provisiones que efectuó para cumplir con todas las exigencias regulatorias. En el cuarto trimestre del año pasado, además, en el que registró unos beneficios de 98 millones de euros, destinó unas provisiones extra de 277 millones de euros. Sin estas, su beneficio neto se habría situado en 602 millones de euros en el conjunto del ejercicio.
La evolución en márgenes es ligeramente negativa. El de intereses se situó en 2.447 millones, un 10% menos que en 2012; el margen bruto descendió un 1,9%, hasta 3.707 millones; y el de explotación bajó un 3,1%, hasta 1.954 millones.
La entidad mejoró su ratio de solvencia de acuerdo a los criterios de la Autoridad Bancaria Europea (ABE) hasta el 11,21% desde el 10,95% de finales de septiembre. Su ratio de capital de acuerdo a los criterios Basilea III como si fueran completamente aplicables se sitúo a cierre de 2013 en el 10,20%.
Una de las grandes sorpresas de los resultados de Popular es su tasa de morosidad, que se dispara al 14,27% desde el 11,84% de septiembre, si bien la entidad explica que ha llevado a cabo un ejercicio de extrema prudencia al incluir como créditos dudosos 2.289 millones que están al corriente de pago. Este importe eleva la ratio de morosidad en 2,77 puntos porcentuales.
Popular confirma que sus créditos totales cayeron un 6,9% el pasado ejercicio, hasta los 102.837 millones, si bien los préstamos a pequeñas y medianas empresas (pymes) crecieron un 9,7%, Mientras, elevó sus depósitos se situaron en 84.908 millones, tras aumentar un 2,2%, y consiguió así mejorar su ratio de créditos frente a depósitos (importe de los créditos entre el depósitos) hasta el 110% desde el 121% de cierre de 2012.
Popular ha sido una de las entidades más prudentes en la gestión de su cartera de deuda pública, de cara a los test de estrés que efectuará el Banco Central Europeo (BCE) y que previsiblemente penalizarán tanto la renta fija soberana de países periféricos como el exceso de liquidez del Banco Central. Así, vendió 5.616 millones de euros en deuda pública y se quedó con 7.186, cuando al cierre del segundo trimestre llegó a alcanzar los 15.543 millones. Incluyendo la deuda corporativa, su exposición a renta fija terminó el año en 14.111 millones frente a los 19.087 de cierre del tercer trimestre.
Por su parte, redujo la apelación a la ventanilla de liquidez del BCE en más de 15.500 millones desde el cierre de 2012, hasta 3.400 millones de euros. A cierre de septiembre, la financiación proveniente del organismo que preside Mario Draghi era de 8.900 millones de euros.