Quijano eleva el resultado de la negociación con Sacyr a la junta del Canal
El pacto no incluirá decisión alguna acerca de los sobrecostes de la obra de ampliación El consorcio constructor considera clave el aplazamiento del pago de anticipos
El administrador de la Autoridad del Canal de Panamá (ACP), Jorge Quijano, va a trasladar a su junta directiva –en la tarde panameña, noche española– las conclusiones de la negociación con el consorcio de constructoras GUPC para evitar la suspensión de las obras de ampliación del Canal por falta de fondos.
Un paso que parece la antesala de un pacto. El grupo de compañías liderado por Sacyr no ha entrado a discutir los sobrecostes por 1.625 millones de dólares por imprevistos en el proyecto, entendiendo que urge más resolver la falta de liquidez para concluir los trabajos. Las desviaciones, por su parte, serán dirimidas por las instancias de arbitraje previstas en el contrato.
Lo que sí es prioritario para el consorcio es la moratoria en el reintegro de anticipos de la ACP, que entre 2012 y 2013 suman 780 millones de dólares. Esas cantidades están avaladas por garantías líquidas y GUPC reclama un aplazamiento en su devolución hasta que se diriman los citados sobrecostes.
La reunión matutina de ayer ya no contó con la presencia de la aseguradora Zurich, cuyo plan es levantar financiación utilizando como prenda la fianza de 400 millones de dólares que asegura la conclusión de la ampliación del Canal. De forma paralela, Zurich reclama la moratoria para los anticipos con el fin de no sacrificar la caja entrante al proyecto.
A los 400 millones de dólares de dinero nuevo, se sumarían otros 200 millones repartidos entre la ACP y GUPC, así como los 500 millones de dólares que la Autoridad del Canal debe pagar aún hasta la conclusión de la ampliación.
El enfado de Zurich
La aseguradora de las obras del Canal aceptó mediar con entre la ACP y las constructoras, pero exigió silencio total ante la prensa. Unas escuetas declaraciones del Administrador del Canal el pasado miércoles provocaron una reprimenda de la Zurich.