Parra admite que Banco de Valencia invirtió en ladrillo en contra del regulador
El ex consejero delegado del Banco de Valencia Domingo Parra ha reconocido este martes ante el juez de la Audiencia Nacional Santiago Pedraz que permitió en 2009 la compra por parte de Aguas de Valencia de terrenos en Oropesa del Mar (Castellón) a pesar de que sabía que el Banco de España había avisado a la entidad en un informe del riesgo de continuar realizando inversiones inmobiliarias.
Según han informado fuentes jurídicas, Parra ha indicado, además, que tanto el expresidente de Banco de Valencia, José Luis Olivas, como los miembros del consejo de administración del banco tenían conocimiento de la operación ya que él les informó verbalmente. Parra formaba parte del consejo de inversiones financieras Agval, sociedad formada por la empresa de los Calabuig Fomento Urbano de Castellón y la extinta entidad financiera, que controla el 60,68% de la compañía acuífera.
La adquisición de los terrenos, realizada a través de la compra de acciones de la inmobiliaria Costa Bellver, se efectuó con un préstamo de 50 millones de euros que Banco de Valencia concedió a Agval con el fin de que se destinara a una OPA de exclusión, para mantener el control sobre la empresa de suministro de agua.
En su declaración ante el juez Pedraz, el presidente de Aguas de Valencia, Eugenio Calabuig y cuatro de sus hermanos desmintieron este extremo y aseguraron que el crédito no era finalista y nada obligaba a Agval.
Parra se encuentra también imputado en otra de las causas abierta por la gestión de Banco de Valencia, en la que Pedraz investiga a 12 antiguos miembros del consejo de administración del Banco de Valencia -entre ellos el expresidente de Bancaja y exvicepresidente de Bankia, Olivas- y el socio de la auditora Deloitte, Miguel Monferrer.
El magistrado instructor admitió a trámite otras nueve querellas sobre la concesión de créditos irregulares, entre las que se encuentra la presentada por el préstamo concedido al presidente de Aguas de Valencia.