La gran banca potencia su cuota en depósitos con intereses en mínimos
Santander ha rebajado el coste de sus nuevos depósitos del 3,05% al 1,41% en nueve meses
El año arrancó con una inequívoca señal de alivio para los márgenes de negocio de la banca española. Sin llegar a emitir una circular, el Banco de España hizo la recomendación firme al sector de que abandonara la agresividad en la remuneración de sus depósitos a plazo y estableció límites concretos de rentabilidad, con la intención de que las entidades renunciaran a una estrategia insostenible en la que se llegó a pagar más por retribuir el ahorro de lo que se obtenía de intereses en los créditos, en un entorno de financiación menguante.
La gran banca se aplicó con obediencia a la consigna del regulador, aliviada de mantener un pulso con las entidades más débiles, que intentaban mantener clientela a toda costa, aun a pesar de la supervivencia de sus márgenes de negocio. Y nueve meses después, su renuncia a una guerra de precios con la banca nacionalizada parece haberles dado la razón. Los grandes bancos aumentan su base de depósitos, ganan cuota a costa de la banca nacionalizada y todo ello, con una remuneración para sus nuevos depósitos que ha caído en picado.
El ejemplo más paradigmático es Banco Santander, que ha sacado el máximo provecho a una apuesta común entre la banca sana, la que no necesitó ayuda europea, por atraer clientes con el argumento de su solidez financiera. La entidad que preside Emilio Botín ha captado 20.000 millones de euros en depósitos en España en el último año, en que ha elevado su volumen en un 12% –frente a un descenso del 5% en los créditos–. En paralelo, el coste de los nuevos depósitos a plazo de la entidad ha descendido desde el 3,05% de diciembre de 2012 al 1,41% del cierre del tercer trimestre de este año, según datos de la presentación de resultados realizada el pasado jueves.
El movimiento ha sido similar en Banco Sabadell, que ha rebajado los tipos de sus nuevos depósitos del 3,39% de fin de 2012 al 1,61% de septiembre. En cambio, el stock de depósitos, aquellos que no son nueva captación, mantiene unos niveles de rentabilidad muy superiores, que han oscilado del 3,58% de diciembre al 2,84% de nueve meses después. Sabadell afirma que ha elevado su cuota de mercado en depósitos desde el 5,41% de agosto del pasado año al 6,86% de agosto de este año, un incremento de 145 puntos básicos de los que, eso sí, 100, corresponden al efecto de las adquisiciones realizadas, como Caixa Penedès y Lloyds.
En Caixabank ocurre un fenómeno similar: el coste de los nuevos depósitos ha descendido desde los 224 puntos básicos (2,24%) de diciembre de 2012 a los 137 de septiembre. Para los depósitos vivos, no los recién captados, ese coste apenas varía en nueve meses desde 254 puntos básicos a 235. Y en Caixabank, que asegura también haber ganado cuota de mercado a septiembre, los depósitos a plazo aumentan el 7,8% internanual, un avance sin duda influido por la incorporación de Banca Cívica y Banco de Valencia.
En BBVA, el coste de los nuevos depósitos está incluso por debajo del de sus competidores y ha descendido al 1,37% en octubre, según explicó la entidad, que ha elevado un 2,6% sus depósitos en los últimos tres meses.
Márgenes
La banca comienza a vislumbrar una mejora en su margen de intereses, pese al entorno de mínimos históricos en los tipos de interés, del 0,5%. La tregua en la guerra del pasivo, la mejora en el coste de financiación del sector gracias a la caída de la prima de riesgo y los ingresos del carry trade contribuyen a enderezar el negocio bancario más básico.
Rivalidad con las nacionalizadas
Por si hubiera tentaciones de intensificar la competencia en depósitos desde la banca nacionalizada, el consejero delegado de Caixabank, Juan María Nin, consideraba el viernes pasado como “intolerable” una estrategia permanente de tipos altos en las entidades que han recibido ayudas públicas. En línea con esta queja, la Comisión Europea investiga la política comercial de los bancos españoles recapitalizados con el fondo de rescate europeo.
Resquicios de rentabilidad
Las limitaciones marcadas por Linde en la remuneración que la banca ofrece en sus depósitos deja un resquicio para retribuir libremente el 15% de la cartera que vence. Este hueco ha sido aprovechado por los inversores, lo que se traduce en el auge de los fondepósitos y en el hecho de que por primera vez desde junio, han aumentado los depósitos de agentes internacionales, según los datos del Banco de España de septiembre.
Caída en hogares
Los depósitos son el destino predilecto del ahorro más conservador, pese al escaso interés que pagan los grandes bancos. Aun así, los depósitos en manos de hogares y empresas españolas –los sectores más sensibles a la crisis– han menguado en septiembre en 3.000 millones de euros.