“Los inversores llegaron con el primer prototipo”
El creador de la aplicación para pedir y pagar taxi a través del móvil cuenta su experiencia
Gracias a Mytaxi hoy ya es posible pedir y pagar un taxi a través del móvil en más de 40 ciudades de seis países. Sven Külper, uno de los creadores de la aplicación, que lleva ya ocho millones de descargas, comparte su experiencia.
Pregunta. ¿Cómo surgió la idea?
Respuesta. Mi socio, Niclaus Mewes, y yo fundamos Mytaxi en 2009. Somos primos, así que nos conocemos desde que éramos jóvenes. Siempre hemos tenido la visión de crear una plataforma de movilidad. Después de analizar el mercado, tuvimos la idea de crear la primera aplicación de taxis que permitiera a los pasajeros y a los conductores estar en contacto directo a través del smartphone, dejando a las radioemisoras y centrales de taxis fuera del proceso.
P. ¿Quién paga el servicio?
"No fue hasta que lanzamos la primera versión que Telekom y Daimler se interesaron por nosotros”
R. Bajarse e instalar la aplicación, disponible para móviles iOS, Android y BlackBerry, es gratis, al igual que su uso para los pasajeros. Los conductores pagan una tarifa de 0,99€euros por viaje completado. No hay costes mensuales para ellos; si no encuentran carreras con nosotros, no tienen que pagar nada.
P. ¿Cómo convencieron a Daimler y a Deutsche Telekom para que invirtieran en su proyecto?
R. Cuando tuvimos la idea no fue fácil encontrar un inversor rápidamente. Era un segmento totalmente nuevo. Fue cuando logramos entrar en el mercado alemán con el primer prototipo, cuando los primeros inversores empezaron a interesarse por nosotros, y T-Venture Holding (Telekom) se convirtió en el más importante de ellos. En 2012 conseguimos una nueva inversión de 10 millones de euros por parte de Daimler Mobility Services. Ambos y otros más han participado también en la tercera ronda, que cerramos en agosto pasado.
P. ¿Qué errores cometieron a lo largo de este proceso que, si pudieran retroceder en el tiempo, evitarían?
R. La lista de cosas que haríamos diferentes nunca terminará, pero lo más importante es que el resultado, aun así, ha sido increíble. Hemos lanzado Mytaxi en cinco países europeos (Alemania, Austria, Suiza, España y Polonia) y también hemos logrado llegar a EE UU, donde estamos en pleno proceso de expansión.
P. Llamar o parar un taxi en la calle parece más sencillo. ¿Cuál es la ventaja de usar la aplicación?
R. Saber de antemano quién está viniendo a recogerte. Cuando alguien pide un taxi a través de la app recibe la foto, el número de teléfono y el nombre del taxista que viene a buscarle. Y también el taxista recibe el teléfono del pasajero. Además, cada pasajero tiene la opción de pedir un chófer y un coche que han recibido puntuaciones excelentes por parte de usuarios anteriores. Otra característica importante es el servicio de pago con móvil, sin necesidad de dinero en metálico o tarjeta.
P. ¿Qué aspectos técnicos, sociales o culturales han tenido en cuenta a la hora de diseñar la aplicación?
R. Teníamos que convencer al pasajero de que, en vez de llamar a un taxi o parar uno en la calle, usara su smartphone. También teníamos que lograr hacer ver al taxista de que usar Mytaxi para conseguir más carreras iba a ser el modo más fácil y barato para ellos, ese era nuestro principal objetivo. Por otro lado, teníamos que tener en cuenta la legislación de cada ciudad. Es la responsabilidad de las oficinas locales adaptar los beneficios de nuestro servicio a la ley de cada lugar. Por ejemplo, cuando alguien pide un taxi a través de la app en Barcelona, el conductor no activa el taxímetro hasta que no llega a por el cliente. En cambio, en Madrid están obligados a bajar bandera en el momento en que reciben el pedido.
P. ¿Qué acogida está teniendo la aplicación entre los taxistas españoles?
R. Cuando lanzamos Mytaxi en España, la primera ciudad fue Barcelona y nos recibieron con los brazos abiertos, igual que en Madrid, donde llegamos poco después. En comparación con otros países donde estamos, los conductores de aquí están muy abiertos a las nuevas tecnologías. Entendieron el funcionamiento rápidamente. No tienen que pagar una tasa mensual y sólo pagan por viaje completado, y además pueden ofrecer otras ventajas como el pago a través del móvil, así que también pueden aceptar a pasajeros que no llevan tarjetas o metálico encima.
P. ¿Y qué acogida está teniendo entre los clientes?
R. Ha sido muy fácil. Ahora es raro encontrar a alguien que no tenga un smartphone. Una de cada tres personas residentes en Madrid o Barcelona tiene uno. De hecho, el 67% de las personas tiene ya un teléfono inteligente. El número crece cada día.