El entorno se ha vuelto mucho más complejo
El entorno se ha vuelto mucho más complejo en las ultimas semanas. Aunque la mejora de datos económicos indica que los mercados de renta variable pueden subir a corto plazo, es bastante difícil calcular el ritmo y dimensión de la retirada de la relajación monetaria de la Reserva Federal, lo que puede producirse el 18 de septiembre (próxima reunión de la Reserva Federal) e influir negativamente en activos de más riesgo. Además los inversores se enfrentan a la situacion militar en Siria y a las elecciones generales de septiembre en Alemania. Para empeorar las cosas, la firme y contenida salida de inversiones de mercados emergentes amenaza con transformarse en una pérdida amplia de confianza, que podría desestabilizar a varias de las principales economías en desarrollo.
La próxima fase de recuperación estará impulsada por la inversión
De todas formas nuestra opinión es que la próxima fase de recuperación estará impulsada por la inversión, como muestran las fuertes cifras de capital en Alemania y Reino Unido y el repunte de gasto empresarial en EE.UU. De hecho nuestros datos de ciclo económico muestran aceleración en los mercados desarrollados –la economía de EE.UU. puede cumplir previsiones de crecimiento del 3% la segunda mitad de 2013, la eurozona parece estar saliendo de la recesión, mientras Japón avanza-.
Sin embargo nuestros indicadores adelantados muestran una diferencia creciente respecto a países emergentes, que han mostrado indicadores de actividad económica negativa por primera vez en un año el pasado junio (especialmente Asia, a pesar de señales positivas de China). Es probable que la acusada depreciación de las divisas emergentes tarde en favorecer sus exportaciones y, mientras, alimente al alza la inflación, cuyas tasas se encuentran en lo más alto de las bandas de los bancos centrales de Turquía, Brasil e India. Ya ha habido subidas de tipos en Brasil e Indonesia, intervención de divisas y control de capitales.
Pero los riesgos a la baja para el crecimiento mundial proceden de la subida de la rentabilidad de los bonos -el mercado de la vivienda de EE.UU. está claramente enfriándose- y de los precios del petróleo, que reducen poder adquisitivo.
Neutrales en renta variable y renta fija, sobreponderamos petróleo
En este estado de cosas es conveniente una posición neutral en renta variable. Preferimos la oportunidad de comprar más adelante este año, después de que la Reserva Federal inicie la retirada de su relajación cuantitativa. Además seria deseable vislumbrar cierta recuperacion en economías emergentes. En nuestra cartera regional elevamos las acciones de Europa de infraponderar a neutral. Estos títulos han tenido recientemente una rentabilidad relativa superior, con una mejora clara de datos economicos que es dificil pasar por alto. De hecho la evolución en la eurozona periférica es especialmente alentadora –crecimiento, competitividad y panorama fiscal mejoran-.
También seguimos sobreponderando acciones de EE.UU., cuya economía está recuperándose, con perspectivas de beneficios empresariales relativamente buenas.
Sin embargo mantenemos una posición neutral en renta variable japonesa, a pesar del sólido crecimiento y políticas de reflación, pues su momento económico está desacelerándose y las subidas del petróleo y depreciación de divisas en Asia puede influir negativamente en los beneficios empresariales.
Al mismo tiempo elevamos la deuda soberana a neutral, con reducción de liquidez -los riesgos geopolíticos están en aumento, lo que debería respaldar la demanda de activos defensivos como deuda del Tesoro de EE.UU. y Bund aleman. Además hemos reducido exposición a deuda empresarial grado de inversión –sus diferenciales de rentabilidad están en mínimos de tres años-.
Por otra parte mantenemos infraponderacion en deuda de mercados emergentes en moneda local, pues creemos que se producirán más presiones bajistas sobre sus divisas. De hecho infraponderamos el won surcoreano, el baht tailandés, el peso chileno y el florín húngaro. También mantenemos una posición a la baja en la rupia india, a pesar del fuerte retroceso de esta divisa las últimas semanas, pues el banco central de India tendrá problemas para recuperar la credibilidad entre los inversores internacionales. Sin embargo, el rublo ruso se beneficia de su sensibilidad con el precio del petróleo.
En divisas de mercados desarrollados, seguimos infraponderando el yen japonés y el euro y preferimos el dólar de EE.UU., cuya economía sigue por delante, mientras la Reserva Federal avanza hacia la retirada del estímulo monetario.
Por otra parte, hemos elevado el petróleo a sobreponderar –un crecimiento económico más fuerte, distorsiones de suministro en Nigeria, Libia e Irak y tensiones en Oriente Medio deberían impulsar sus precios-.
Sesgo cíclico a traves de sectores tecnologico e industrial
Seguimos infraponderando telecomunicaciones –donde hemos vuelto a reducir exposición-, finanzas y consumo discrecional- más caro y vulnerable a la subida del precio del petróleo.
Por su parte, la renta variable de mercados emergentes ofrece unas valoraciones atractivas, a precio/beneficios de unas 9,7 veces. Además las previsiones de beneficios han alcanzado un mínimo histórico en relación con países desarrollados. Pero es demasiado pronto para elevar esta exposición. Tendríamos que ver el fin de la depreciación de divisas y pruebas sólidas de aceleración del crecimiento en China.
Además, ante el pronunciado descenso de indicadores adelantados, hemos recortado la exposición a renta variable de Pacífico sin Japón, vulnerable a la desaceleración de economías emergentes y con cotizaciones caras. Es el caso de las acciones australianas, que cotizan al mismo múltiplo que en EE.UU. La rentabilidad por dividendo es históricamente alta en Australia (4,7%) pero probablemente sea dificil de mantener a medida que la Reserva Federal empiece a retirar su apoyo monetario. Además el dólar australiano, a pesar de haber llegado a perder 15% frente al dólar estadounidense desde abril, todavia nos parece esta caro.
Gonzalo Rengifo, director general de Pictet AM en Iberia y Latam.