Sareb apuntala cuatro grandes operaciones tras el éxito de ‘Toro’
La sociedad confía en cerrar estas grandes transacciones antes de fin de año.
La actividad comercial del banco malo comienza a tomar velocidad. Tras unos primeros meses de vida más centrada en su puesta en marcha que en la venta de su carga, la sociedad de gestión de activos procedentes de la reestructuración bancaria ha ido apuntalando sus distintos frentes de actuación y se atreve ya a jugar en varias pistas a la vez. Fuentes conocedoras de la estrategia de Sareb adelantan que además de intensificar su ritmo de ventas en los canales minoristas, la sociedad tiene previsto cerrar antes de final de año al menos cuatro grandes operaciones más además del reciente Proyecto Toro con el que ha inaugurado sus ventas a mayoristas.
Project Bull, como se conoció internacionalmente, supuso la venta de un paquete de 939 viviendas –repartidas fundamentalmente entre Andalucía, Canarias y la Comunidad Valenciana–, 750 garajes y trasteros y un local comercial, que fue valorado en unos 100 millones de euros. La transacción, en la que intervinieron como asesores KPMG, Baker & McKenzie, Ashurts y Monthisa, se cerró a comienzos de mes a favor del grupo H.I.G. Capital, que venció al resto de postores con la puja presentada a través de su filial Bayside Capital. El éxito de la operación, “nos permite ser optimistas con respecto a las carteras que planeamos sacar al mercado mayorista en el segundo semestre del año, y que también conllevarán la creación de vehículos de inversión”, adelantaba entonces el director de activos inmobiliarios de Sareb, Juan Barba.
De hecho, ya antes de que se diese por cerrada esta operación, se hizo público un nuevo movimiento del banco malo, esta vez en torno a la comercialización de grandes paquetes de crédito inmobiliario. El Proyecto Bermudas, como ha sido bautizado, engloba un paquete de activos financieros procedentes de compañías inmobiliarias cotizadas por valor nominal de 1.200 millones de euros. En este marco se ha cerrado ya la venta de 245 millones en créditos a Colonial, por valor nominal, adjudicados a la firma Burlington Loan Management Limited, y está pendiente dar salida a las carteras correspondientes a Metrovacesa y Realia.
Este tipo de operaciones, explican fuentes del mercado, son mucho más ágiles y atractivas que las ventas de activos inmobiliarios, ya que la compraventa de carteras de crédito ya es una práctica consagrada con entidades financieras y el examen de los activos crediticios en venta no requiere de los desplazamientos que suele imponer la visita de inmuebles físicos. Con todo, el buen hacer de los gestores de Sareb en este campo resulta especialmente clave de cara a rentabilizar la sociedad dado que dos terceras partes de su carga son créditos.
Una progresiva mejora en la venta a minoristas
La incursión de Sareb en las operaciones mayoristas se ha consolidado ya entrado el verano, cuando ha comenzado a cerrar algunas compraventas de calado que han ayudado a impulsar las nuevas operaciones en marcha. Hasta ahora, sin embargo, el grueso de la actividad del banco malo ha estado centrada en la venta de activos a minoristas a través de la red de oficinas de la banca nacionalizada. Aunque el primer dato ofrecido, el de ventas a cierre de mayo, recogía solo 550 transacciones de vivienda y unos ingresos de 500 millones, la sociedad ha seguido elevando su actividad y prevé seguir haciéndolo a un ritmo exponencial en los próximos meses. Así, a finales de julio, la sociedad hablaba ya de la venta de 1.800 inmuebles y unos ingresos brutos de 900 millones. La cifra, eso sí, aun se aleja de las 7.200 ventas de vivienda previstas para el año en el plan de negocio.
Pese a ello, la firma que descargó a la banca nacionalizada y asistida de su carga tóxica no ha dejado de lado sus esfuerzos en el campo de venta de inmuebles. Prueba de ello es la Operación Teide centrada en la venta de viviendas en un paquete valorado alrededor de los 150 millones de euros.
La comercialización de locales de oficinas es otro de los marcos de actuación que la sociedad no quiere perder de vista y para lo cual se ha diseñado otro paquete, en lo que se conoce como Operación Corona, por un monto aproximado de 450 millones de euros.
Finalmente, fuentes conocedoras de la actividad comercial del banco malo admitían ayer que acaba de ponerse en marcha un nuevo proyecto, denominado Runner –corredor en inglés– bautizado así porque esconde la venta de su participación en el centro comercial Parque Corredor, situado en Torrejón de Ardoz (Madrid). Se trata de un complejo que acoge más de 150 marcas comerciales, entre las que se encuentran desde la gran superficie Alcampo –principal accionista del complejo– a tiendas de moda, restaurantes y otros establecimientos.
Sareb cuenta concretamente con un 35% del centro comercial, uno de sus mejores activos en cuestión de este tipo de establecimientos, que heredó en diciembre del nacionalizado Catalunya Banc. El valor total del complejo, según fuentes del mercado, superaría los 100 millones de euros.