Sacyr vende su rascacielos de París con una tasación de 450 millones
Los compradores son cuatro fondos franceses El activo contaba con 437 millones de deuda Sacyr recorta la deuda de Testa en 386 millones
Sacyr ha sellado esta tarde la venta de su rascacielos parisino Adrià, ubicado en el barrio financiero de La Defense. La operación se ha cerrado en 450 millones, de los que Sacyr recibe 224,7 millones y deja de pagar otros 225 millones en un crédito que tenía con la filial francesa Tesfran. Los compradores son cuatro fondos, al parecer de nacionalidad gala, que han realizado la inversión con la intermediación del fondo inmobiliario Primonial.
La tasación está ligeramente por encima de la deuda de 437 millones que arrastraba el edificio, único activo internacional en la cesta de la patrimonialista Testa. También está en línea con la última valoración del inmueble. Torre Adrià, con 54.000 metros cuadrados repartidos en 39 plantas dedicadas al alquiler de oficinas, fue adquirida en 2006 por Sacyr, convirtiéndose en uno de sus principales activos. Por entonces, el grupo que preside Manuel Manrioque pagó unos 600 millones de euros.
Tras esta desinversión, Testa se queda como socio minoritario de la nueva sociedad propietaria del rascacielos, OPCI Preim, con un paquete del 32%. Sacyr ha enmarcado la venta, que se daba por descontada desde hace meses, como parte de su estrategia de rotación de activos maduros.
La filial de Sacyr, que ha sido asesorada por CBRE en la colocación de Torre Adrià, concentra ahora su negocio en España. En este país tiene edificios con una ocupación media del 97% y consigue un ratio de ebitda sobre ventas del 80%. Las ventas de Testa en 2012 se alzaron hasta los 251 millones de euros. El beneficio neto de esta división patrimonialista fue de 61 millones.