El Gobierno concretó ayer con la banca uno de los puntos del plan estratégico anunciado en abril para la economía española. Mariano Rajoy avanzó entonces que la banca pondría a disposición de la pequeña y mediana empresa financiación por 10.000 millones de euros adicionales, en un acuerdo que quedó firmado ayer por el Ministerio de Economía y las dos patronales del sector, la Asociación Española de Banca (AEB) y la Confederación Española de Cajas de Ahorros (CECA), en la que ahora se engloba el conjunto de entidades financieras que ha recibido ayudas.
La banca se ha comprometido a aumentar este año en 10.000 millones de euros el crédito a las pymes, un sector que incluye a microempresas y pequeñas y medianas empresas, que representa el 99,88% del tejido empresarial y que sufre duramente la falta de financiación. De hecho, la gran esperanza está ahora puesta en que el BCEanuncie mañana jueves nuevas medidas para estimular el crédito a pymes españolas e italianas.
De la citada cantidad, 5.000 millones corresponderán a las entidades adheridas a la AEB, y otros 5.000 millones a la CECA. El importe de los 10.000 millones es en realidad una cuantía mínima con la que el sector se compromete a incrementar la financiación a las pymes sobre la ya recibida en 2012. El acuerdo reserva a las entidades financieras la capacidad de decidir el destino y condiciones de esa financiación. “Todas las operaciones que impliquen la concesión de crédito u otras facilidades de financiación serán estudiadas individualmente según los criterios y condiciones habituales de cada entidad adherida, con la finalidad de evaluar su viabilidad y conveniencia”, explica el texto del acuerdo, que aclara además que las entidades no quedan obligadas a aceptar las solicitudes de crédito. “Su concesión será totalmente discrecional para la entidad y en ningún caso puede interpretarse el contenido del acuerdo y el de sus anexos como una obligación de concesión de las operaciones solicitadas”, añade.
El pacto contempla además la creación de una Comisión de Seguimiento y Coordinación que velará por la ejecución del acuerdo. Estará formada por un representante de Economía, que la presidirá, por un representante del Banco de España y uno de cada patronal bancaria, CECA y AEB. Y, según recoge el texto del acuerdo, la estadística que tomará como referencia para su seguimiento será el importe de las nuevas operaciones de préstamos y créditos a las sociedades no financieras por importe inferior a un millón de euros, que publica el Banco de España.
La cifra de cierre de 2012 fue de 145.954 millones de euros –con una caída del 16% respecto a 2011– y el dato más reciente, del mes de abril, asciende a 11.809 millones de euros. Con el compromiso adquirido ayer por la banca ante el Gobierno, el volumen de crédito a conceder este año superaría, por tanto, los 155.000 millones de euros. La estadística con la que vigilar el crédito a pymes es aun así confusa y ni siquiera el Banco de España desglosa este segmento.
El acuerdo firmado ayer contempla también que se prestará especial atención a la financiación de circulante –verdadera materia prima para asumir los gastos del día a día y garantizar la supervivencia en medio de la crisis– y a los nuevos proyectos de inversión. Fuentes financieras puntualizan además la importancia de distinguir entre el crédito, concedido para nuevos proyectos, y las líneas de financiación o circulante.
Y las cifras que publica la banca en sus planes ya contabilizan cuantías importantes. Banco Popular ha puesto a disposición de las pymes en lo que va de año 6.700 millones –de los que 3.000 son línea de financiación a 18 meses y otros 3.000 compromisos con el ICO–; Sabadell lleva 2.800 millones de euros, con la previsión de hacer 9.000 millones en el año y Bankia prevé otros 10.000 millones para este año.