Pescanova negocia con la banca el crédito a euríbor más 4%
La consultora prevé reunirse con la Xunta para intentar que avale la operación También mantiene contactos con otros acreedores para que participen en la financiación
El administrador concursal de Pescanova designado por la CNMV, Deloitte, mantuvo este viernes una conference call con los principales acreedores del grupo para continuar negociando las condiciones del préstamo de 55 millones que ha solicitado para garantizar la continuidad de la actividad de la compañía y evitar su colapso. Seis de los siete miembros del antiguo steering committee (Sabadell, Novagalicia, Popular, Bankia, CaixaBank y Deutsche Bank) han mostrado su disposición a dar más liquidez a Pescanova, si bien Deloitte ha iniciado contactos con otras entidades acreedoras para intentar que se sumen a este grupo. Entre ellas se apunta a los portugueses Caixa Geral y Espirito Santo, el alemán Commerzbank, y los españoles Santander, BBVA, Ceiss y Liberbank.
Fuentes próximas a las negociaciones afirman que el viernes Deloitte comunicó que estos encuentros continuarán durante la próxima semana.
Al mismo tiempo se están perfilando las condiciones del préstamo urgente solicitado por Pescanova. Se espera que esta línea de crédito se firme en los próximos días, a un tipo de interés de euríbor más el 4% y a un plazo de un año. En principio, la banca ha considerado que se trata “de un precio de mercado, razonable”.
Como requisito para conceder esta financiación, la banca había exigido que Deloitte detallara cuál iba a ser el destino de estos fondos y que se comprometiera a dar prioridad al cobro de esta deuda.
Reunión con la Xunta
Deloitte también tiene previsto reunirse la próxima semana con la Xunta, con el objetivo de que esta avale la operación, según ha comunicado a alguno de los bancos acreedores.
El grupo presidido por Manuel Fernández Sousa, ahora aparcado de la gestión por el juez, no ha presentado todavía las cuentas del ejercicio 2012. Hasta ahora, la compañía ha ocultado la cifra de deuda total del grupo. En un recurso que presentó a la decisión del juez de suspender las facultades del consejo de administración, Pescanova afirmó que su pasivo ascendía a 3.000 millones. Algunas fuentes financieras, sin embargo, apuntan que la cifra supera los 3.300 millones. La compañía, según fuentes consultadas, ha reconocido a bancos acreedores no tener deuda contabilizada en filiales extranjeras.
Por su parte, la auditora BDO aseguró el viernes que entregará a la Fiscalía Anticorrupción toda la información que haya realizado sobre Pescanova, firma de la que ha sido auditora 11 años.
Diez millones de euros urgentes para la filial argentina
El grupo pesquero ha detallado a la banca el destino por filiales de estos 55 millones. Según los datos que ha facilitado a los acreedores, la filial con las necesidades de liquidez más urgentes es la de Argentina, donde tendría que inyectar unos 10 millones para continuar con su actividad. A mediados de abril, de hecho, algunos de los buques en este país tuvieron que amarrar por la falta de dinero para gasóleo. Además, el pasado 2 de mayo una de sus filiales chilenas se declaró en quiebra.