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La deuda de México, Brasil y Chile supera a España

Es bueno para el inversor empezar a mirar la región de Latino América, en concreto a través de fondos, gestionados por profesionales con capacidad para analizar y valorar oportunidades. Es el caso de deuda soberana en moneda local. En 2012 su rentabilidad fue mejor de lo esperado, llegando a superar 15%. Para los próximos dos o tres años será previsiblemente más elevada que aquellas a las que estamos acostumbrados en países desarrollados.

Además, hay que tener en cuenta la potencial revalorización de estas divisas, componente muy importante, que debe de gestionarse de forma muy dinámica. La realidad es que los dos últimos años apenas se han movido por lo que en general las valoraciones están en nivel muy atractivo. Sumando cupón y divisas, la rentabilidad anual esperada los próximos años debe estar entre 7% y 10%.

G-5, perspectivas macroeconómicas positivas

En este sentido el inversor en deuda soberana en Latinoamérica tiene que tener en cuenta que los dos mayores países, Brasil y México, representan 55 y 35% del índice, seguido de 10% entre Chile, Colombia y Perú.

Se trata del grupo de países que nos gusta denominar "G-5", con perspectivas macroeconómicas positivas, que están entrando en un ciclo positivo que puede durar entre tres y cinco años. En resumen, una muy buena oportunidad de inversión.

La deuda de México, Brasil y Chile supera a España

Fitch acaba de elevar de BBB a BBB+ con perspectiva estable la califiación crediticia de la deuda soberana a largo plazo de México, mejor que la de España. El rating de Brasil por Moody’s y S&P se sitúa también por encima del español y Chile cuenta con calificación Aa3 de Moddy’s, AA- de S&P y A+ de Fitch.

Hay que tener en cuenta que en México la clase media está aumentando, con un impulso de consumo muy sólido. Su población está empezando a acceder a préstamos hipotecarios, que aún solo representan 8% de su PIB, comparado con 60% o 70% de países desarrollados. Además su presidente Peña Nieto ha anunciado un conjunto de reformas laborales y en sectores clave (energía, telecomunicaciones, financiero) para que el país pueda seguir creciendo. De hecho en los viajes que hago por la región se dice que México puede ser el próximo Brasil. Además, en la zona de Querétaro y norte están volviendo a instalarse multinacionales de diversos sectores (automóvil, linea blanca, electrónica) que se habían trasladado a otros países por bajo coste de mano de obra. Pero Méjico cuenta en estos momentos con los costes laborales más competitivos. A ello se añade que el peso mexicano está asequible, a diferencia del real de Brasil.

En Brasil el principal riesgo es la inflación, por encima del objetivo de su Banco Central, que ha subido tipos de interés por primera vez, tras fuertes bajadas en 2012. Su crecimiento se ha reducido del 4% al 3% y debe ser capaz de limitar la inflación.

Por su parte Chile es uno de los países que mejor lo está haciendo, en cumplimiento con el plan macroeconómico de su presidente Sebastián Piñeira. La política chilena estará centrada en 2013 en las elecciones primarias del 30 de junio. Además Perú puede crecer al 7 u 8%, mientras Colombia ha tocado suelo en 4%. En ambos casos, como en México, se quiere acometer un plan muy ambicioso de infraestructuras y están recibiendo elevados flujos de inversión directa del exterior. Así que hay queda mucho por hacer, con oportunidades en sectores como energía, transporte e infraestructuras. A ello se añade el apoyo de la demanda doméstica.

La deuda empresarial en Latino América tiene grado de inversión

Buscamos compañías con una política financiera prudente, líderes en sus sectores (característica típica de mercados emergentes), como Telmex en México. Además es importante que tengan acceso a los mercados financieros y buen gobierno corporativo. Es el caso de Cielo (Brasil), con calificación crediticia BBB+ estable/Baa2 estable, uno de los grandes en soluciones de pago electrónico, con 13.195 empleados. También es destacable el productor de carne de vacuno brasileño JBS, el procesador más grande el mundo, con calificación B1/BB. En 2006 era un negocio familiar y hoy, con presencia internacional, cotiza en Bovespa con capitalización de 10.000 millones de dólares.

En conjunto, entendemos que la renta fija está más barata que la variable en la mayoría de plazas de la región, aunque que las previsiones de beneficios se están estabilizando. Estas acciones cotizan en torno a 15 veces beneficios esperados, más caro que las de países desarrollados, pero permiten acceder a empresas con altos niveles de crecimiento. Además tienen mayor apalancamiento operativo que sus pares y con ello mayor potencial de incremento de beneficios en caso de aumento de la demanda global.

Se da la circunstancia de que las acciones en América Latina tienen un peso relativamente elevado en consumo, sobre todo en comparación con industrias cíclicas. Así que conviene ser muy selectivos. Las acciones de consumo básico están muy caras -a casi cuatro veces valor contable- y conviene la exposición a la demanda doméstica meidante empresas financieras, que están mucho mas baratas. Es el caso del sector bancario Mexicano -en etapa temprana del ciclo crediticio- o alguna aseguradora, como Brasil Insurance, que opera en un mercado fragmentado de pequeñas empresas familiares y está aumentando su cuota de mercado mediante una estrategia agresiva de adquisiciones.

Gonzalo Rengifo, director general de Pictet AM en Iberia y Latinoamérica.

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