Un accionista de Sony quiere sacar más partido de 'Iron Man' y Beyoncé
La compañía japonesa ha rechazado la propuesta y afirma que la división "no está a la venta"
El inversor Daniel Loeb, propietario del hedge fund Third Point, ha solicitado a Sony que escinda su división de entretenimiento, uno de los negocios más rentables de la compañía japonesa, que tiene los derechos cinematográficos de las sagas cinematográficas de Iron Man y Spiderman, además de los discos de artistas musicales como Beyoncé o Adele.
En opinión de Loeb, que controla a través de su hedge fund un 6% del capital de la compañía, la escisión en Bolsa de entre un 15 y un 20% de Sony Entertainment a través de un colocación de derechos dirigida a los actuales accionistas de la compañía. Una escisión que podría reducir la deuda de la compañía y podría suponer un revulsivo para su cotización, que podría incrementarse en un 29%, según el cierre de la cotización en la Bolsa de Tokio.
Con esta operación, según Loeb, la compañía dirigida por Kazuo Hirai podría centrarse en su división de dispositivos electrónicos, uno de los negocios que durante el pasado año obtuvo un importante crecimiento gracias a la gama de smartphones Xperia, a pesar del protagonismo de Samsung en el mercado de los teléfonos de alta gama.
Una propuesta que ha sido rechazada de plano por la compañía, inmersa en un profundo proceso de reestructuración que le ha llevado a cerrar con beneficios el año pasado por primera vez en cuatro años. Sony ha declarado que esta división es muy importante para el crecimiento de la compañía y que “no está a la venta”. Asimismo, ha declarado que “esperamos con interés continuar el diálogo constructivo con nuestros accionistas mientras perseguimos nuestra estrategia”. La petición de Loeb ha sido bien recibida por el mercado. Los ADR de Sony que cotizan en Nueva York suben un 10%, después de haber llegado a revalorizarse un 18% en sus máximos intradía. En lo que va de año, los títulos de Sony se revalorizan un 86% en la Bolsa de Nueva York.
La compañía japonesa obtuvo un beneficio neto el pasado año de 330 millones de euros, después de haber llegado a perder unos 3.500 millones de euros un año antes gracias a un programa de reestructuración de la compañía denominado “One Sony”, dentro del cual la compañía se ha desprendido de algunos de sus históricos inmuebles.
La compañía anunció la pasada semana que espera situar su beneficio del ejercicio 2013 por encima de los 50.000 yenes, unos 384 millones de euros.