Kodak cede activos a su mayor acreedor para salir de la quiebra
Eastman Kodak ha anunciado un acuerdo con su mayor acreedor, su plan de pensiones en Reino Unido, con el que la empresa fotográfica estadounidense da un paso importante para salir de la suspensión de pagos en la que se encuentra desde hace más de un año.
Kodak venderá por 650 millones de dólares su negocio de imágenes personalizadas y escaneado de documentos a su plan de pensiones de Reino Unido, que a cambio dejará de reclamar los 2.800 millones de dólares que demandaba a la compañía de Rochester (Nueva York).
La transacción permite a Kodak “superar múltiples impedimentos para su reorganización, resolver las potenciales demandas a nivel mundial, asegurar las operaciones fuera de EE.UU.” y “proveer la liquidez necesaria para emerger de la suspensión de pagos”, dijo su presidente y consejero delegado, el español Antonio Pérez.
La empresa fotográfica anunció que tiene previsto solicitar mañana, martes, la aprobación de este acuerdo al Tribunal de Bancarrota de Nueva York que lleva su caso, al que presentará también por primera vez su plan para salir de la suspensión de pagos.
La firma se acogió en enero de 2012 al Capítulo 11 de la Ley de Bancarrotas de EE.UU. con el fin de centrarse en el negocio de la impresión, y desde entonces se ha deshecho de otros activos, como las más de mil patentes tecnológicas que vendió por 527 millones de dólares.
Kodak había ya había anunciado este mes un acuerdo para vender sus activos de escaneado de documentos a la japonesa Brother por 210 millones de dólares, pero, como el acuerdo no ha sido aprobado todavía por el juez de bancarrota, solicitará retirarlo para poder venderlo al plan de pensiones de Reino Unido.
La empresa, que fue uno de los treinta componentes del índice Dow Jones de Industriales durante más de siete décadas, dejó de cotizar en la bolsa de Nueva York el año pasado y sus acciones se negocian ahora en los mercados secundarios, donde se disparaban más del 19 % a media sesión.