10 años de déficit excesivo
Simetría casi perfecta. Tras una década de cumplimiento a rajatabla del Pacto de Estabilidad (1998-2007), España va a tardar otros 10 años en situar de nuevo el déficit por debajo del límite del 3% del PIB.
La barrera se traspasó por primera vez en 2008 (con un déficit del 4,5%). Y a pesar del ajuste de los tres últimos ejercicios parece difícil que pueda desandarse todo el camino antes de 2017.
Incluso si se mantiene el ritmo de consolidación seguido hasta ahora (cuatro puntos desde 2009 si se descuenta el préstamo de la zona euro para sanear la banca), el déficit todavía estará en el 3% en 2015.
En teoría sería posible lograr ese objetivo durante este ejercicio y los dos próximos. España ya hizo un ajuste similar para entrar en el euro cuando pasó del -7,2% en 1995 al -3% en 1998. Ahora tendría que pasar del -7,1% del año pasado al 3% en 2015, para librarse del expediente de déficit excesivo abierto hace cuatro años.
Pero cada vez cuesta más seguir el paso. Primero, por el coste político y social de un ajuste tan prolongado. Y segundo, porque se lleva a cabo durante un período de recesión frente a un crecimiento anual del 3% de media en el período de convergencia para la Unión Monetaria.
Ahora los ingresos apenas aumentan, la tasa de paro se ha estancado en el 25% y los costes de financiación siguen siendo elevados (aunque la prima de riesgo ahora parezca muy baja, sigue estando en 300 puntos básicos, el triple del umbral que al comienzo de la crisis se consideraba sostenible). Solo coincide el gasto en intereses (en torno al 4% del PIB), pero con la tremenda diferencia de que el volumen de deuda se ha duplicado y se acerca ya al billón de euros.
De modo que todo indica que el expediente de déficit excesivo contra España va a seguir abierto durante una década. Un calendario que contrasta con el optimismo inicial de la Comisión Europea, que concedió a España de plazo para corregir los números rojos hasta finales de 2012.
Unos meses después, el entonces comisario de Asuntos Económicos, Joaquín Almunia, ya se percató del error de cálculo y concedió una primera prórroga de un año, hasta finales de 2013.
El año pasado, el sucesor de Almunia, Olli Rehn, tuvo que prolongar otro año más el plazo. Y el mes que viene, el finlandés parece dispuesto a conceder una tercera prórroga.
El nuevo plazo abarcará, como mínimo, el resto de la legislatura de Rajoy (finales de 2015) y del mandato de Rehn (finales de 2014). Pero los datos muestran que el déficit seguirá siendo excesivo. Y que tanto Rajoy como Rehn (si repiten), o sus sucesores, tendrán que seguir lidiando con el expediente una década después de que se iniciara.
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Resumen del calendario del procedimiento de déficit excesivo
27 abril 2009: el Ecofin (consejo de ministros de Economía de la UE) confirma que el déficit de España en 2008 fue excesivo y concede de plazo hasta finales de 2012 para corregirlo.
2 diciembre 2009: el Ecofin avala las medidas tomadas por el Gobierno de Zapatero para corregir el déficit y concede una primera prórroga hasta finales de 2013.
15 junio 2010: la Comisión Europea avalas medidas adoptadas por el Gobierno de Zapatero y mantiene el plazo concedido.
10 julio 2012: el Ecofin avala las medidas del Gobierno de Rajoy concede una segunda prórroga, hasta finales de 2014.
29 mayo 2013: la Comisión valorará el programa de reformas y los nuevos objetivos de déficit del programa de estabilidad que aprobará este viernes (26 abril) el Gobierno de Rajoy. Todo indica que España necesita una tercera prórroga. Si es de un año (2015), hará falta una cuarta. Y si es de dos (2016), probablemente también.
Fuente: Consejo Europeo
Evolución del déficit español desde la puesta en marhca de la unión monetaria
1995 -7,2%
1998 -3%
2002 -0,2%
2006 +2,4%
2009 -11,2%
2012 -7,1% (10,6%, con rescate bancario incluido).
Fuente: Eurostat