Notarios y registradores escenifican sus diferencias
Los registradores elogian la reforma del registro civil porque ahorrará gastos al ciudadano y la Administración Acusan a los notarios de haberse negado a los cambios y no hacer crítica constructiva
El decano presidente del Colegio de Registradores de España, Alfonso Candau, en un encuentro con periodistas -organizado por la Asociación de Informadores y Comunicadores Jurídicos (ACIJUR) -celebrado ayer mostró su respaldo a la reforma que, de llevarse a efecto, atribuirá las actuales funciones del Registro Civil al cuerpo de Registradores, todo ello a pesar de reconocer que “al menos trescientos” del millar con los que cuenta el colectivo “se han manifestado en contra de asumir estas competencias”.
Candau consideró “acorde a los tiempos” la introducción de las nuevas tecnologías en el sistema registral de forma que de llevarse a efecto se produciría una “viaje de datos, no de documentos” lo que evitará gastos y trámites innecesarios para la administración y los ciudadanos.
Negó taxativamente el presidente de los Registradores que se avance a un modelo “de gran hermano” ya que “la Agencia de Protección de datos ha validado el sistema”, afirmando que “sólo los que vivan en el fraude” deben temer este cambio.
Asimismo negó Candau que la reforma pretenda hacer “ ganar dinero" a los registradores y que su apoyo al proyecto viene sostenido por que "fortalece la institución de los registradores” y que las innovaciones y mejoras a introducir adelantan la preparación del cuerpo para asumir nuevas funciones o competencias.También negó tajantemente que la condición de registrador del presidente Rajoy tenga que ver con posiciones lobistas de defensa del cambio. Al contrario afirmó que es "una desgracia” este hecho para los registradores negando que el Presidente del Gobierno reciba remuneraciones “directas o indirectas del Registro" y que su vinculación se limita a la pertenecía al Cuerpo de Registradores. “Dudo mucho que cuando se vaya o le echen vuelva a su registro”, concluyó sobre el tema.
En todo caso el presidente de los Registradores no resolvió la cuestión del coste del sistema asegurando ya que “es prácticamente imposible saber lo que cuesta el Registro Civil” – que el Director General de los Registros y el Notariado Joaquín José Rodríguez cifró en 450 millones la semana pasada- y cuales serían los aranceles y su tarifa de los actos por los que deberán pagar los ciudadanos o empresas. En todo caso si aseveró que“los actos que ahora son gratuitos lo seguirán siendo” y que esos aranceles novedosos los soportarán “quienes no sean ciudadanos ni Administración Pública" que tendrán que pagar un arancel o tasa por las consultas. En este caso se encontrarían a los despachos de abogados o asesores jurídicos que quieran consultar “la vigencia de un poder”, citó a titulo de empleo.”No queremos ganar dinero, pero tampoco que nos cueste ", resumió. Candau convencido de que los nuevos sistemas supondrán "un ahorro tremendo" y se evitará el "fraude".
Destacó por último las “ventajas de que las certificaciones y las consultas se podrán hacer digitalmente con DNI electrónico”.
A pesar de las correctas formas con las que se refirió al notariado – muy crítico con la reforma- no se abstuvo Candau de afirmar su convencimiento de que a estos " no les interesa hacer mejoras" y desveló que durante los tres meses en los que ha trabajado la comisión de estudio ministerial estos no aportaron propuestas sino que “solo decían no”.