La caída en Bolsa de Apple, como el 40% del Ibex 35
Tras presentar las cuentas de su primer trimestre fiscal, Apple vio este jueves como sus acciones llegaron a caer más de un 12%. Desde septiembre, han perdido un 36%, que en términos de valor de mercado supone la evaporación de 175.600 millones de euros, casi el 40% de la capitalización de las empresas del Ibex 35.
Apple vivió este jueves una jornada catastrófica en Bolsa. Tras presentar las cuentas de su primer trimestre fiscal, sus acciones llegaron a caer más de un 11%. En términos de capitalización bursátil, la empresa de la manzana se llegó a dejar en torno a 50.000 millones de dólares (unos 37.300 millones de euros), el valor de tres Nokias o casi la suma de las capitalizaciones de HP y Dell.
Pero, desde septiembre, la caída es terrorífica. Una pesadilla para quienes decidieron apostar por Apple. Desde el máximo histórico de 705 dólares, marcado a mediados del citado mes, los títulos de la empresa de Tim Cook se han dejado en torno a un 36%. Este hundimiento, en términos de capitalización bursátil, supone la evaporación de cerca de 235.000 millones de dólares (unos 175.600 millones de euros). Una cantidad de dinero que importada a este lado del Atlántico sería casi equivalente al 40% de la capitalización conjunta de las empresas que componen el Ibex 35, que al cierre de ayer rondaba los 441.000 millones de euros. Sin duda, un pequeño agujero para las carteras de muchos inversores.
Pero, ¿por qué Apple ha vivido esta dura caída en Bolsa? Aparentemente, los números han sido brillantes. La empresa de la manzana vendió 47,8 millones de iPhones en el primer trimestre de su año fiscal (seis smartphones por segundo), 22,9 millones de iPads (tres tabletas por segundo, sobre todo por el tirón del iPad Mini) y dos millones de Apple TV, un 60% más que en el mismo periodo del año pasado. Además, su negocio internacional aportó el 61% de los ingresos de la compañía, y en China, un país clave por su tamaño y crecimiento, la venta de iPhones creció un 67%. En términos generales, sus ingresos subieron un 17%, hasta 54.500 millones de dólares (40.000 millones de euros), con un beneficio de 13.100 millones, en línea con el mismo periodo del ejercicio anterior.
Así, todo apunta a que en el mercado se han abierto muchas interrogaciones sobre las expectativas de la empresa. Además, algunas cifras publicadas por Apple, pese a ser enormes, supieron a poco. No gustó, por ejemplo, que la empresa igualara sus ganancias a las de hace un año, algo que se explica porque el mercado de teléfonos inteligentes y las tabletas va madurando y porque la competencia en estos segmentos crece, sobre todo de la mano de Google y Samsung. En este escenario, el margen bruto de Apple se situó en el 38,6% entre octubre y diciembre frente al 44,7% del mismo periodo del ejercicio anterior.
En la caída en Bolsa, igualmente han pesado las expectativas de Wall Street. Aunque la compañía vendió iPhones como rosquillas, las ventas de la multinacional se quedaron en el rango bajo de lo esperado por los analistas, que habían puesto el listón entre 47 y 50 millones. Además, Apple avanzó una previsión de ventas de entre 41.000 y 43.000 millones de dólares para el trimestre en curso, por debajo del consenso de 45.900 millones.
Lo que queda claro tras la jornada del miércoles es que los inversores no parecen estar dispuestos a ver a una Apple que no bata récords trimestre tras trimestre o que simplemente muestre la más mínima muestra de debilidad. Si no, no se entendería que se castigue a una empresa que ha ganado en este trimestre todo lo que ganó Google en todo el pasado año y que tiene 137.000 millones en cash, casi un tercio de su valor en bolsa.
Apple quiso mostrar la seguridad de su futuro y, coincidiendo con la presentación de sus cuentas, dijo que su consejo de administración había aprobado el pago de un dividendo de 2,65 dólares por acción, cuyo desembolso tendrá lugar el 14 de febrero. Una retribución para los accionistas de la que Google no puede presumir.
Con todo, Apple deberá seguir demostrando que es capaz de innovar y disipar cualquier duda sobre su capacidad para ser un referente en la industria. Cook apuntó que tienen nuevos productos en cartera, pero no especificó cuales. Se habla de un televisor y de un iPhone más barato para mercados emergentes. Pero, puede pasar al final que, con tanta euforia o castigo, los analistas acaben abrasando a la empresa con sus exageradas previsiones.