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Vuelve el recibo cada dos meses que se anuló en 2008

El Gobierno recupera a partir de hoy la factura bimestral de la luz

Las eléctricas volverán a facturar a sus clientes cada dos meses con lecturas reales. Así lo establece un real decreto-ley que anula el recibo mensual con lectura bimestral que estableció el anterior Gobierno.

Hoy entra en vigor un nuevo sistema de lectura y facturación de la electricidad para los consumidores con una potencia contratada inferior a 15 kW. Con él se recupera el cobro de los recibos de la luz cada dos meses con lectura reales de consumo. Un decreto publicado ayer en el BOE_elimina así la factura mensual obligatoria que estableció en 2008 el anterior ministro de Industria, Miguel Sebastián, lo que acarreó multitud de reclamaciones por parte de los consumidores.

Con el mecanismo actual, los consumidores reciben la factura mensualmente, si bien, el primer mes incluye una lectura estimada del consumo (que se realiza con una metodología establecida por el Gobierno) y el segundo debe elaborarse con una lectura real del contador: si en el anterior la compañía se excedió o, por el contrario, subestimó el consumo, debe ajustarlo.

La nueva medida, que fue una de las primeras que planteó hace un año el secretario de Estado de Energía que acaba de abandonar su cargo, Fernando Marti, no tiene carácter obligatorio, pues los clientes que así lo deseen pueden pedir a su comercializadora que les mantenga la factura mensual.

El Ministerio de Industria considera que con esta medida se corrigen las deficiencias del mecanismo anterior. Aunque la facturación de los puntos de suministro con potencias en baja tensión de 15 kW ya se hacía cada dos meses desde el año 2001 (para los de menos de 10 kW esta obligación se fijó en 2008), el nuevo real decreto pretende homogeneizar la situación de todos ellos.

No obstantes, en el caso de que los clientes tengan ya contadores de telegestión y telemedida la lectura (que realiza la empresa distribuidora) se realizará con carácter mensual, con lo que la comercializadora dispondrá de dichas lecturas para pasar el recibo también mensualmente.

En aquellos casos en los que el encargado de la lectura no pueda acceder a los contadores, deberá dejar un aviso al usuario para que este facilite la lectura por teléfono o internet dentro de un plazo determinado. En cualquier caso, debe realizarse una regularización de las lecturas anualmente.

Si dentro de un periodo de facturación haya regido más de un precio (por una revisión de las tarifas) la facturación se realizará en base a lecturas reales.

En el caso de los consumidores que hayan contratado el suministro de energía en el mercado libre pero que paga los peajes de acceso igual que los que están acogidos a la tarifa de último recurso (TUR) la norma es común a la de estos. Así, los citados peajes de acceso a las redes se pasará con la periodicidad acordada con la comercializadora y siempre con base a lecturas reales. También en este caso, si el usuario tiene contadores de telemedida, la factura se le pasará mensualmente.

En cualquier caso, los consumidores del mercado libre podrán acordar con su compañía el pago de una cuota fija al mes proporcional a sus consumos históricos más el término de potencia. Estas facturas se regularizarán una vez al año.

Además de la obligación de informar a sus clientes, el Gobierno mantiene para las comercializadoras el actual sistema de estimación de lecturas, que tiene en cuenta el consumo del mismo mes del año anterior y el de los últimos meses. Reclamaciones Las eléctricas recibieron en 2011 más de un millón de reclamaciones, según el primer informe con datos reales elaborado por la CNE, que adelantó el lunesCinco Día. Las empresas admiten la situación, de hecho son datos de ellas, y lo achacan a muchas de las arbitrariedades regulatorias del Gobierno.Entre ellas están, según fuentes del sector, los cambios en la periodicidad de las facturaciones y las refacturaciones "por la manipulación que el Gobierno hace de los peajes". Casila mitad de las reclamaciones se refieren al precio y los consumos.

Un mecanismo con efecto psicológico

Cuando el anterior ministro de Industria, Miguel Sebastián, decidió cambiar la periodicidad de la factura eléctrica de bimestral a mensual, lo hizo por el efecto psicológico que tendría en los consumidores, tal como reconocieron en su departamento. El efecto era el siguiente: si lo que los usuarios pagaban cada dos meses se dividía en dos, tendrían la sensación de pagar menos. De esta manera, se diluirían las más que posibles subidas de la luz que el ministerio auguraba. Sin embargo, con dichas subidas la sensación del usuario es que pagan en un mes lo que antes en dos.La medida aprobada a finales de 2008 se tradujo en un caos que duró varios meses en el que el precio del recibo se disparó misteriosamente. Una explicación es que al obligar a las distribuidoras a facturar con lecturas reales, y a la vista del abuso de las estimaciones que se producen, emergieron grandes volúmenes de consumos que llevaban mucho tiempo sin ser leídos y que los clientes tuvieron que pagar de golpe. Además, las empresas se vieron incapacitadas para leer los contadores mensualmente y el Ministerio de Industria tuvo que rectificar la norma aplicando un sistema mixto: factura mensual y lectura real bimestral.Al facturarse la mitad de los recibos con estimaciones, las reclamaciones continuaron, De hecho, las eléctricas atribuyen las quejas de los usuarios a tanto cambio regulatorio.Ahora, la vuelta a la factura bimestral puede tiene otro efecto perverso: la sensación de que se pagará el doble que antes, aunque se paga cada dos meses. Además, señalan quienes critican tanta modificación, es que muchos usuarios ya se habían acostumbrado. Y aunque sería voluntario ya le obligarán a solicitar el recibo mensual a su compañía.

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