El Banco de España reforma su modelo de supervisión
El Banco de España reformará su modelo de supervisión para evitar fallos como los ocurridos durante la actual crisis financiera. Los cambios, plasmados en un texto al que deberá dar el visto bueno la troika, incluyen la elaboración de un informe semestral en las entidades de más tamaño. También se acelerarán las labores de inspección.
El Banco de España endurecerá su actual sistema de vigilancia de las entidades financieras con el objetivo de que no se vuelvan a producir errores como en la actual crisis, que ha dejado reducido el mapa bancario a poco más de una decena de bancos y ha obligado a inyectar miles de millones de euros para su recapitalización.
Los cambios propuestos por el organismo que dirige Luis María Linde, recogidos en un informe pendiente de la aprobación de la troika (integrada FMI, CE y BCE) y que se enmarca dentro de las exigencias planteadas en el memorando de entendimiento (MoU), incluyen la obligación de realizar un informe semestral sobre la situación de todas las entidades sometidas a un seguimiento continuado, es decir, las de mayor tamaño. En este, según indica el supervisor, se deberán incluir "todos los ajustes y deficiencias observados". Para el resto de entidades se plantea una vigilancia "anual a distancia", que se completaría con visitas por parte de los inspectores cada tres años.
Además, se tomarán medidas para acelerar las actuaciones de inspección. En este sentido, y una vez finalizado el análisis de estos equipos de inspectores, se entregará a la entidad inspeccionada un documento resumen de las situaciones observadas que requieran corrección o hayan sido corregidas durante la actuación inspectora. "Se pretende implantar un procedimiento de corrección temprana de forma que, a medida que aumente el perfil de riesgo de una entidad concreta, se activen de forma relativamente automática actuaciones supervisoras predeterminadas, cada vez más coercitivas, para detener cuanto antes el previsible deterioro futuro", explica el Banco de España en su informe. En este punto se incluirán tanto medidas de tipo cualitativo, como mejoras en los órganos de gobierno, como medidas de tipo cuantitativo (porcentajes de retención de beneficios, etcétera). Este procedimiento pasará de ser "recomendación" a convertirse en "requerimientos formales".
Discrepancias
Otra de las modificaciones es que queden reflejadas las posibles discrepancias mostradas por los inspectores, una de las quejas de este colectivo que ha acusado al Banco de España de no haber tenido en cuenta sus continuas advertencias acerca de determinadas irregularidades detectadas en algunas entidades financieras durante la actual crisis.
También propone crear una "estructura organizativa transversal, el Comité de Política Macroprudencial (CPM), que analice los riesgos macroprudenciales". Este elevará a la Comisión Ejecutiva del Banco de España dos tipos de actuaciones: avisos y requerimientos.