El seguro se juega 2.500 millones de euros en 2013 por alianzas en banca

La partida en la que se juega la relación de bancos y aseguradoras ha llegado a su ronda final. La concentración bancaria ha reducido al mínimo el número de jugadores y ha encarecido el precio de las fichas. Cada entidad deberá tener un único socio de bancaseguros por ramo (vida y no vida) antes de que concluya 2013. Las venta de más de 15 'joint ventures' implicadas moverá más de 2.500 millones de euros.

Las entidades financieras españolas tienen 12 meses para reorganizar su relación con el mundo del seguro. La normativa actual obliga a bancos y cajas a contar con un único socio para la comercialización de seguros por cada ramo, pero con la sucesión de fusiones durante los tres últimos años, la mayoría de grupos cuentan con dos, tres e incluso cuatro relaciones de bancaseguros.

Mientras ha durado la reorganización del sector bancario, este consideró como una tarea aplazable, y se apostó por avanzar en el saneamiento y la recapitalización de entidades. Sin embargo, esta fase ya está prácticamente encarrilada, y durante el presente ejercicio la relación con el mundo del seguro deberá tener máxima prioridad.

Uno de los acontecimientos que ha fijado el precio de las fichas en esta compleja partida es el acuerdo alcanzado entre Bankia y Aviva, por el que la entidad nacionalizada pagó el 18 de diciembre 608 millones a la aseguradora británica por el 50% de Aseval, la 'joint venture' que había creado con Bancaja (una de las impulsoras de Bankia junto con Caja Madrid y otras cinco pequeñas entidades).

Acuerdos como este se van a suceder durante todo 2013 en casi todos los grupos bancarios españoles. La propia Bankia, cuyo socio principal es Mapfre, tiene aún en su órbita alianzas con Caser. Además, es muy probable que acabe vendiendo a Mapfre el 100% de Aseval, según explican fuentes del sector.

La Caixa -que tiene un acuerdo en seguros generales con Mutua Madrileña, y controla Segurcaixa, la mayor compañía española de seguros de vida- absorbió en 2012 a Banca Cívica, cuyas entidades mantenían acuerdos de bancaseguros con al menos cuatro aseguradoras diferentes, que deberán ser compensadas antes o después.

En total, más de 15 joint venture de bancaseguros están en el aire, y los contratos de venta de las mismas podrían supondrán desembolsos por más de 2.500 millones de euros, de acuerdo con fuentes del sector.

Aviva, que llevó el caso de Aseval a la Corte de Arbitraje de la Cámara de Comercio de Madrid (pedía 944 millones y ha obtenido 608), defiende la exclusividad en la distribución de seguros que firmó en su día con diversas entidades, como Caixa Galicia, Caja España o Banco de Valencia -todas ellas participantes en diversos procesos de integración- y reclamará compensaciones, al igual que ha hecho Aegon por el acuerdo que mantenía con Caja Mediterráneo (ahora propiedad de CAM).

Más presión con las subastas pendientes

Aunque el baile de nacionalizaciones y fusiones está prácticamente terminado, aún quedan varias operaciones por aclararse, con su correspondiente implicación en las respectivas alianzas de bancaseguros.La primera entidad que encontrará pareja será la nacionalizada CatalunyaCaixa, cuya subasta se ha vuelto a retomar, y previsiblemente estará resuelta durante las próximas semanas. La entidad vendió en 2010 el 50% de su aseguradora a Mapfre por 447 millones de euros. Ahora, en función de qué grupo acabe adquiriendo la entidad catalana, esa 'joint venture' podría tener los días contados. El grupo Santander, principal candidato para adquirir CatalunyaCaixa, según todas las quinielas, ha firmado recientemente un acuerdo con Aegon para desarrollar dos compañías conjuntas de seguros (una de vida y otra de seguros generales) y sería muy probable que el acuerdo de CatalunyaCaixa con Mapfre se acabara deshaciendoEn el caso de Novagalicia Banco, su subasta no está tan clara como la de CatalunyaCaixa. La Xunta de Galicia ha presionado para que Bruselas permita que la entidad intente sobrevivir en solitario y buscar por su cuenta socios inversores. Sin embargo, mantiene un conflicto abierto con Aviva, que quiere una compensación por la filial conjunta que provenía de Caixa Galicia. La otra aseguradora con la que mantiene un acuerdo es Caser, tanto en la red de Caixanova como en la de Banco Gallego (también controlado por el Estado). Si, finalmente es nacionalizada, también el acuerdo con Caser podría quedar en el aire, en función del socio de referencia en seguros que tenga el grupo comprador.

El primer canal de distribución del sector

La crisis que ha vivido el sector financiero español durante los últimos años no ha evitado que el segmento se bancaseguros haya ido creciendo hasta convertirse en el primer canal de distribución del sector asegurador. De acuerdo con los datos recientemente presentados por ICEA -un organismo de investigación y estudio vinculado a la patronal del sector- los bancos y cajas comercializaron el 41,21% del negocio en España durante 2011, superando por primera vez a agentes y corredores (40,06%). El resto de canales (entre los que destaca la comercialización a través de internet) llegó al 18,73%.En 2010, los mediadores aún conseguían imponerse a la bancaseguros por dos puntos porcentuales, pero el escaso avance el año pasado de la producción de los mediadores (del 0,18%), no pudo resistir el empuje de la banca, con una subida del 6,34%.Por ramos, la distribución de seguros a través de sucursales bancarias es especialmente intensiva en el ramo de vida, donde copan el 74,05% del total. En cambio, en seguros de riesgos generales (coches, hogar, etc.) este canal tan sólo distribuía el 10,48%.En cambio, los mediadores siguen controlando los seguros de no vida (distribuyen el 60% del total) y el 18,74% de los seguros de vida.El resto de canales, distribuye el 29,51% de las primas de no vida (por la penetración de la comercialización de seguros de coche a través de internet) y un 7,21% en seguros de vida.