El FROB establece un valor económico negativo de 4.148 millones de euros para Bankia
La Comisión Rectora del FROB ha determinado un valor económico negativo para el grupo BFA de 10.444 millones de euros, mientras que para la filial cotizada Bankia establece un importe negativo por 4.148 millones de euros. El impacto que esta valoración supone para los accionistas de la entidad no se conocerá hasta enero.
La Comisión Rectora del Fondo de Reestructuración Ordenada Bancairia (FROB), el vehículo a través del que se va a canalizar la ayuda europea para la banca española, ha aprobado las valoraciones definitivas de las entidades nacionalizadas, el paso previo para la inyección de recursos del Mecanismo Europeo de Estabilidad (MEDE) que hará posible su recapitalización. Y la valoración establecida para Bankia apunta a un agujero patrimonial, que deberá cubrirse con las ayudas de Bruselas, de 4.148 millones de euros. Esta cuantía forma parte de una valoración patrimonial del conjunto del grupo BFA que arroja un importe negativo de 10.444 millones de euros, inferior a los 13.000 millones del agujero detectado en la valoración realizada en junio.
Esta nueva valoración renueva al FROB como accionista por el cien por cien del capital de BFA, que a su vez posee el 48% de su filial cotizada Bankia. Pero no será hasta el mes de enero cuando se conozca el impacto que dicha valoración tendrá en los accionistas privados del banco cotizado, unos 350.000, que poseen el 52% del capital restante.
La recapitalización del grupo pasa por una ampliación por parte de BFA por importe de 13.459 millones de euros. Serán los recursos que inyecte el MEDE a través del FROB y que se sumarán a los 4.500 millones de euros ya aportados el pasado 3 de septiembre, a cuenta del rescate europeo, y que permitieron apuntalar en primera instancia la solvencia del grupo al menos por encima de los mínimos legales. En definitiva, BFA recibirá 18.000 millones de euros de ayuda europea, que incluyen los 10.700 millones que irán a parar a Bankia. El banco cotizado los recibirá a través de una emisión de bonos contingentes convertibles, conocidos como cocos. Todo este proceso quedará completado antes de que finalice este año.
Ya en enero, esos cocos suscritos por Bankia se convertirán en acciones en manos del FROB. Y será entonces cuando se conozca el peso que tendrá el capital público en la entidad y cuál será el valor de los títulos de los accionistas privados. A diferencia de lo sucedido en Novagalicia o Catalunya Banc, entidades no cotizadas y en las que se ha reducido el capital actual a cero, se espera que la inyección de la ayuda europea mantenga algún valor económico para los títulos de los accionistas privados, que ahora sufren una pérdida del 81,7% desde la salida a Bolsa de Bankia, en julio de 2011. En Banco de Valencia tampoco se ha hecho tabla rasa, si bien los accionisats privados conservan tan solo el 1% del capital. El agujero patrimonial de la entidad valenciana, de 6.341 millones de euros según la valoración del FROB, equivaldría al 30,7% de su volumen de activos al cierre del tercer trimestre, frente al 1,44% que supondría para Bankia.
Fuentes de mercado calculan que, a consecuencia de la inyección de las ayudas públicas, el actual accionista de Bankia sufrirá una dilución de hasta el 90%, a lo que habrá su sumar la dilución adicional que implicará el canje previsto de preferentes por acciones y que se realizará en el primer trimestre de 2013.