El buen dato del PIB hace que Wall Street olvide el abismo fiscal
Wall Street se decanta por el terreno positivo en una jornada en la que se ha anunciado la compra de la operadora de la Bolsa de Nueva York (NYSE).
Los inversores del parqué neoyorquino se decantan por las compras a la espera de una votación en la Cámara de Representantes sobre el "plan B" republicano para evitar el abismo fiscal, un proyecto que Obama ha dicho que vetará si sale adelante. El dato positivo del Departamento de Comercio sobre la economía estadounidense, que creció en el tercer trimestre el 3,1%, cuatro décimas por encima del cálculo preliminar y el más alto desde el final de 2011 consigue llevar a la Bolsa de Nueva York al verde. El Dow Jones sube el 0,45% (13.311 unidades), el S&P 500 gana el 0,55% (1.443 enteros) y el Nasdaq avanza el 0,20% (3.050 puntos).
Este dato ha pesado más en el ánimo de los inversores que el del aumento en 17.000 de las solicitudes de subsidio por desempleo la semana pasada en EE UU hasta quedar en las 361.000, el primer incremento en cinco semanas.
Empresas
Desde el ámbito empresarial la protagonista indiscutible ha sido la propia gestora de la bolsa de Nueva York, NYSE Euronext, que se dispara el 34,10% en bolsa tras anunciar que ha acordado ser adquirida por Intercontinental Exchange (ICE), que sube por su parte el 1,40%, en 8.200 millones de dólares en efectivo y acciones.
Los integrantes del Dow Jones quedan prácticamente divididos entre los avances y los retrocesos, de forma que los números rojos los encabezan la farmacéutica Merck (-3,44%) y el fabricante de maquinaria pesada Caterpillar (-0,85%). El lado contrario de la tabla lo encabeza el conglomerado General Electric (1,10%) y Bank of America (2,95%).
Fuera de ese índice, la cadena de tiendas de ropa y complementos deportivos Nike sube el 1,25% y el fabricante canadiense de la BlackBerry, Research in Motion, sube el 3,67% a la espera de que presenten sus resultados tras el cierre de la sesión.
En cuanto a las materias primas, el petróleo de Texas sube el 0,16% y cierra en 90,13 dólares por barril, con lo que encadena cinco jornadas consecutivas al alza y supera la barrera de los 90 dólares por primera vez en dos meses impulsado por el crecimiento mayor al esperado de la economía estadounidense en el tercer trimestre.