Fitch cree que el FLA tendrá un "papel clave" en la financiación de las autonomías en el medio plazo
La agencia de calificación crediticia Fitch Ratings ve probable que el "papel clave" que está desempeñando el Fondo de Liquidez Autonómica (FLA) a la hora de aportar financiación a las comunidades autónomas que no tienen acceso a los mercados de capitales y bancarios se extienda a 2013 y en el medio plazo.
En informe sobre las finanzas públicas mundiales, la agencia cree que, debido al proceso de reestructuración del sector financiero y dada la gran cantidad de deuda que tiene que ser refinanciada en 2013, "el apoyo del Gobierno central a las CC AA será necesario".
Fitch, que apunta que alrededor de 15.000 millones de euros de deuda autonómica y local a largo plazo vencerán en 2013, calcula que sus necesidades de financiación brutas ascenderán a alrededor de 40.000 millones de euros. "Aunque se han adoptado medidas por parte del Gobierno central para aliviar los problemas de liquidez, los riesgos de financiación persisten", añade.
Por otro lado, la agencia de calificación crediticia explica que las perspectivas siguen siendo negativas para el sector público español, debido principalmente a la débil economía nacional y a los elevados riesgos de liquidez.
"El rápido crecimiento del desempleo en España, el crecimiento negativo del PIB y las medidas de austeridad es probable que supongan otros dos años de déficits presupuestarios para las entidades subnacionales", apunta.
Así, destaca que las medidas para reestructurar la Administración pública, como una rebaja de salarios de los funcionarios y un adelgazamiento del sector público, se han intensificado desde el verano de 2011 y deberían traducirse en un menor déficit en 2012 y años posteriores.
Sin embargo, la agencia considera que la recuperación de la economía española es todavía "complicada" y, en general, que las medidas de austeridad adoptadas por diferentes niveles de gobiernos locales y regionales "podrían retrasar la recuperación económica".
En este sentido, apunta que existe el riesgo de que algunas de las medidas anunciadas por el Gobierno central en la primera mitad del año, como los recortes en sanidad y educación, hayan sido retrasadas y solo tengan un impacto parcial en el ejercicio 2012.
Fitch recalca que algunas autonomías han previsto un menor déficit para 2013 pese a que recibirán unos menores ingresos del Gobierno central. Esto se debe a que esperan que las medidas anunciadas, más los recortes en educación y sanidad, les permitirán reducir el gasto, "dado que un incremento en los actuales ingresos es improbable".
Por último, considera un "paso alentador" los cambios en la Ley de sosteniblidad financiera y estabilidad presupuestaria, que inculca la disciplina presupuestaria en las autonomías, ya que de lo contrario se enfrentarán a graves multas, llegando incluso a intervenir el Gobierno en las regiones que consideren que se han desviado de su objetivo.